A partir del próximo 10 de enero, la embajada y consulados de Estados Unidos en México implementarán un nuevo procedimiento para solicitar visa de no inmigrante, el cual prevé la participación de una empresa privada para la captura inicial de datos y recopilación de información biométrica antes de la entrevista con el oficial consular.

De esta forma, explicó Sean Murphy, cónsul general de la representación diplomática, el personal consular se enfocará en verificar el cumplimiento de los requisitos legales por parte de los solicitantes.

El diplomático informó que esta decisión es una respuesta a la alta demanda de solicitudes para la obtención de esa visa, que en México ascendió a 1.4 millones en los pasados 12 meses.

El funcionario estadunidense destacó que entre las virtudes del nuevo sistema se encuentra que el costo del trámite será menor –se estima un ahorro de hasta 15 por ciento, al evitarse el pago de mensajería–, habrá más opciones de pago y, con la inclusión del contratista encargado del centro de servicio al solicitante de visa, es posible ampliar el horario y días de atención.

Murphy explicó que la cuota requerida para el trámite seguirá siendo el equivalente a 140 dólares, que cubrirá todos los aspectos del proceso de solicitud: agenda de la cita, captura de datos, entrevista y devolución del pasaporte.