Toluca, 18 de diciembre. El equipo estadunidense, representativo de la división tres de la Asociación Atlética Colegial Nacional (NCAA, por sus siglas en ingles), vino a exponer lo que sabe hacer de forma muy elemental, pero eso le bastó para imponerse rotundamente 48-7 a la selección de la Comisión Nacional Deportiva Estudiantil de Instituciones Privadas (Conadeip) en el Tazón de las Estrellas.

La Conadeip integró su escuadra con base en los jugadores de su Conferencia Premier, que así fueron los representantes nacionales, pero pronto el equipo enseñó sus carencias y se perdió en confusiones.

Entraron en ritmo antes que nosotros y lo aprovecharon, señaló, a manera de disculpa, Juan Carlos Maya, el coach de los Borregos del campus Toluca del ITESM, quien estuvo al frente del equipo local.

Kyle Simmons, el Mariscal de la Ohio Northern University, se encontró con Kyle Ross, el ala abierta, en un envío de 21 yardas, bueno para la primera anotación en el primer cuarto y eso marcó el principio de la puesta en ritmo de los visitantes, sin que importara la falla del punto extra.

El equipo mexicano empezó hace casi dos semanas sus prácticas para ponerse en ritmo. Los estadunidenses, provenientes de 41 escuelas de 12 estados, se concentraron en la capital mexiquense hace cinco días, pero su mayor peso y su técnica más depurada fueron los factores fundamentales para que salieran del campo La Congeladora con el trofeo de la victoria.

Jugada del Tazón de las Estrellas en el campo de La Congeladora, en TolucaFoto Notimex

Jacob Caron, un quarterback de casi dos metros de estatura, del Pomona Pfizer College, quien se alternó con Simmons el mando ofensivo, fue designado el jugador más valioso de la contienda, la cual atrajo a un buen número de aficionados que casi llenaron las graderías.

Caron fue parte activa de las anotaciones de su equipo, al lanzar cuatro pases de touchdown a sus receptores, quienes tuvieron gran habilidad para desmarcarse de la, a veces, precaria custodia de los profundos del equipo local.

La escuadra de la Conadeip, que insistió demasiado en jugadas terrestres, carburó hasta el tercer cuarto cuando consiguió su solitaria anotación por pase de Ricardo Alonso, el quarterback de los monarcas de la Conferencia Premier, los Aztecas de la Universidad de las Américas, quien encontró a Sergio Segovia, de los Borregos Toluca, en las diagonales y le envió el ovoide.

Jugamos mejor que el año pasado y mucho nos ayudó que nunca perdimos el balón y no nos interceptaron, dijo, por su parte, John Roslien, uno de los entrenadores de los ganadores.