Madrid, 4 de enero. La fiscalía de la Audiencia Nacional española pidió hoy una pena de 10 años para el líder de la izquierda nacionalista vasca Arnaldo Otegi y siete personas más por haber intentado reconstruir la ilegalizada coalición Batasuna, a la que Madrid acusa de ser el brazo político de ETA.

El fiscal Vicente González Mota pidió esta pena por un delito de integración en organización terrorista para siete responsables independentistas detenidos en octubre de 2009, entre ellos Otegi y el líder sindicalista vasco Rafael Díez Usabiaga, ex secretario general del sindicato LAB.

Los ocho fueron arrestados bajo cargos de intentar reconstruir a Batasuna, ilegalizada en 2003 por la justicia, a través de otra entidad llamada Bateragune.

El fiscal estima que Bateragune es el órgano diseñado para sustituir a la Mesa Nacional de Batasuna y por eso tomaría las decisiones estratégicas del frente institucional de ETA.

Otegi está en prisión preventiva por esta causa, al igual que tres líderes vascos, mientras Díez Usabiaga y otros tres fueron liberados bajo fianza hace meses.

Según el diario El País, Batasuna instó a ETA a que proclame un alto el fuego unilateral como expresión de voluntad para un definitivo abandono de la violencia y que no se limite a declarar un alto el fuego permanente y verificable, como en marzo le pidieron el mediador sudafricano Brian Currin y cuatro premios Nobel de la Paz irlandeses y sudafricanos.