Choferes de al menos 400 mil unidades de carga y de pasajeros –según dirigentes– se movilizaron ayer en el Distrito Federal y en varios estados para demandar al gobierno federal que revierta las alzas al precio de los combustibles y amenazaron con suspender el envío de productos básicos a las centrales de abasto de las grandes ciudades.

La Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas (Amotac), Asesores en Turismo y Transportación Terrestre del Sur y la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad enviaron unidades a la residencia oficial de Los Pinos y a las secretarías de Hacienda y Crédito Públicio (SHCP) y de Comunicaciones y Transportes (SCT), en la ciudad de México.

Edmundo Delgado, dirigente de la Confederación Nacional de Transporte Federal Adolfo López Mateos, explicó frente a la SCT que el margen de ganancia de los transportistas se ha desplomado debido a los aumentos a los combustibles, los peajes y las mordidas a policías federales.

Subsidios a cambio de apoyo en campañas

Delgado acusó de corrupción al gobierno federal, en particular a la SCT, que beneficia a ciertas organizaciones de transportistas con subsidios al diesel a cambio de apoyo en campañas políticas.

En esta movilización, la primera que enfrenta el recién nombrado titular de la SCT, Dionisio Pérez Jácome, no participaron integrantes de las cámaras nacionales del Autotransporte de Carga ni de Pasaje y Turismo.

Unos 700 integrantes de la Amotac bloquearon carreteras, autopistas y calles en diversos puntos de Veracruz. Acusaron al presidente Felipe Calderón de ser un enemigo del pueblo, de la clase trabajadora y de empresarios pequeños y medianos, por disponer medidas lesivas para las mayorías, en referencia al gasolinazo aplicado el sábado anterior.

Los inconformes bloquearon de manera parcial e intermitente las autopistas Puebla-Veracruz, en el tramo Córdoba-Orizaba; Veracruz-La Antigua–Jalapa, y Tuxpan-Poza Rica-Cardel. En Tuxpan, los camioneros estacionaron sus unidades en el bulevar costero, mientras en Jalapa un centenar de transportistas bloquearon el entronque con la autopista a Veracruz, en el poblado Las Trancas.

Las movilizaciones duraron unas cinco horas, y Rodolfo Agüera Hernández, dirigente regional de la Amotac, anunció que se reanudarán este martes para repudiar los aumentos al diesel y a los peajes, los abusos en retenes militares y policiacos, el impuesto empresarial a tasa única y otras medidas que agreden a la mayoría de los mexicanos.

Alrededor de 200 socios de la Amotac bloquearon parcialmente carreteras en Yucatán. La fila de vehículos varados en el tramo Mérida-Campeche medía cerca de cinco kilómetros.

El delegado de la Amotac en Yucatán, Andrés Poot, informó que los choferes partieron desde la Ciudad Industrial de Mérida y se detuvieron en la vía federal Kopomá-Chocholá (carretera Mérida-Campeche), donde permanecieron casi 10 horas.

La Amotac también organizó una caravana por Pachuca, Hidalgo. El delegado de la organización en el estado, Rigoberto González, sostuvo que en 10 años de gobiernos panistas los bolsillos de los transportistas y ciudadanos en general han sido saqueados con incrementos al combustible y a productos de la canasta básica.

Los transportistas se manifestaron frente al palacio de gobierno de Pachuca, donde exigieron al gobernador Miguel Osorio Chong cumplir la promesa de abrir nuevas rutas en la ciudad.

Según la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo, también hubo manifestaciones en los municipios de Actopan y Tolcayuca.

Casi 60 choferes desquiciaron el tránsito en Chetumal, donde bloquearon el tramo Chetumal-Majahual, en la comunidad Huay-Pix, donde se les unieron taxistas del Sindicato Único de Choferes de Automóviles de Alquiler, con quienes se dirigieron al centro de la capital de Quintana Roo.

Comparaciones para retrasados mentales

En la calzada Vallejo, al menos 100 granaderos del Distrito Federal cerraron el paso a 10 tráileres y 15 unidades del servicio colectivo de pasajeros afiliados a la Unión de Transportistas para el Campo (Untrac), que avanzaban por carriles laterales de la autopista México-Querétaro.

Ernesto Flores Javier, representante de la Untrac, delegación Valle de México, advirtió que el sector no soporta más alzas.

Las movilizaciones de ayer fueron la respuesta ante la sordera gubernamental y la falta de presión del Congreso. El ejemplo ya lo dieron los bolivianos, afirmó Edmundo Delgado Ramírez, de la Confederación Nacional de Transportistas. Advirtió que para que el precio del diesel regrese a 6.30 pesos por litro (el actual es de 9.20 pesos) su gremio acordó apagar motores y dejar de llevar alimentos a las centrales de abasto.

El gobierno cree que está ante retrasados mentales, al comparar los precios de los combustibles del país con los vigentes en Estados Unidos, donde los choferes ganan en dólares y no pagan tenencia. Allá un transportista puede cambiar su unidad en un año; aquí es para toda una vida, dijo

En tanto, el diputado local priísta Dolores Galindo dijo que pescadores de San Blas, Nayarit, también resienten las alzas a la gasolina y el diesel, pues debido al cambio climático tienen que navegar más para hallar cardúmenes.

Andrés T. Morales, Luis A. Boffil, Carlos Camacho, Javier Chávez, Silvia Chávez y Myriam Navarro, corresponsales