Guanajuato, Gto., 26 de febrero. De las 18 quejas por tortura que la Procuraduría de los Derechos Humanos recibió el año pasado, 16 fueron interpuestas por miembros del crimen organizado que intentaban desvirtuar las acusaciones en su contra, dijo el procurador de Justicia de Guanajuato, Carlos Zamarripa Aguirre.

En su informe anual, el ombudsman Gustavo Rodríguez Junquera consignó que las prácticas de tortura en la Procuraduría de Justicia estatal dieron lugar a 18 quejas, pese a las reformas ofrecidas en 2009, tras el asesinato de un campesino por policías ministeriales que le aplicaban descargas eléctricas.

Hay casos en que nos emiten recomendaciones por quejas que usan a la procuraduría para efectos de defensa, y ésta se ha desgastado al investigar imputaciones formuladas para desvirtuar la acción de las autoridades ministeriales, replicó Zamarripa Aguirre.

Los quejosos vinculados al crimen organizado –añadió– piensan que acudir a la defensoría humanitaria los beneficiará, incluso cuando se recomienda abrir averiguaciones contra los torturadores, éstas no prosperan, pues a las presuntas víctimas se les debe aplicar el Protocolo de Estambul, y la mayoría está en prisiones federales.

“Un exhorto, incluso, tuvo que ver con zetas evadidos del penal de Matamoros, Tamaulipas, pero la investigación quedó inconclusa”, añadió el funcionario.