Concacaf sigue con 3.5 plazas; FIFA tuvo ingresos por 4.2 mil mdd
Viernes 4 de marzo de 2011, p. a13
Zúrich, 3 de marzo. La reunión del comité ejecutivo de la FIFA en esta ciudad deparó varias novedades, cuando faltan menos de cuatro meses para las elecciones en las que Joseph Blatter intentará obtener un nuevo mandato al frente de la entidad, que preside desde 1998.
La FIFA decidió mantener sin cambios la distribución de las plazas de clasificación entre los diferentes continentes para el Mundial de 2014.
De esta manera, Europa seguirá contando con 13 lugares; África con 5; Sudamérica y Asia con 4.5; la Concacaf (Norte, Centroamérica y el Caribe) con 3.5 y Oceanía 0.5.
Los quintos clasificados de Sudámerica y de Asia, el cuarto de la Concacaf y el ganador de la zona de Oceanía disputarán en partidos eliminatorios los últimos lugares. Éste fue uno de los pequeños cambios en el proceso clasificatorio, ya que con un sorteo se definirá qué equipos se enfrenten en las eliminatorias, a diferencia de cuando las confederaciones rivales estaban decididas con anterioridad.
Al ser Brasil el anfitrión y no participar en la eliminatoria, podría haber seis equipos sudamericanos en 2014. En Sudáfrica 2010 fueron cinco.
Por otra parte, Joseph Blatter dijo de ser el hombre más feliz del mundo, ya que puedo anunciar que la Copa de Sudáfrica fue un tremendo éxito financiero. Por primera vez, las cuentas de la FIFA superaron 4 mil millones de dólares en cuatro años
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El responsable de finanzas, Markus Kattner, informó que el organismo registró en el periodo 2007-2010 una cifra de negocios de 4 mil 200 millones de dólares, logrando un beneficio de 631 millones en ese periodo, con lo que las reservas ascendieron a mil 280 mdd.
Se prevén mayores ingresos para los Mundiales de Rusia 2018 y Qatar 2022. El comité ejecutivo aprobó contratos televisivos por un valor de mil 700 millones de dólares sólo para Cercano Oriente y algunas zonas de Asia y Latinoamérica.
Esa suma garantiza, según la FIFA, un superávit de 90 por ciento en comparación con los Mundiales de 2010 y 2014.
La FIFA es financieramente fuerte, pero dependiente de la Copa del Mundo.