Sábado 26 de marzo de 2011, p. 24
Bruselas. Los líderes europeos acordaron un nuevo paquete de medidas anticrisis en una cumbre de dos días, pero se vieron obligados a retrasar el aumento de su fondo de rescate y reconocieron que se enfrentan a nuevas amenazas por la caída del gobierno en Portugal. En una batalla por reducir una crisis de deuda que ya dura un año y ha llevado a que tanto Grecia como Irlanda acepten rescates, la Unión Europea había prometido presentar una solución integral en la cumbre del 24 y el 25 de marzo con la que esperaba calmar a los mercados. Pero la dimisión del primer ministro portugués José Sócrates, después de que sus medidas de austeridad fueran rechazadas por el Parlamento, arrojó una gran sombra de duda.