Televisa y su Iniciativa México, segunda parte, continúan polarizando a diputados federales, pues algunos consideran que el acuerdo que se acaba de firmar no es un bozal ni un límite a la libertad de expresión, sino un control para enfrentar la violencia que se genera desde la delincuencia organizada, mientras que otros ubican el plan de la televisora en el terreno de la autocensura y la cultura de generación de miedo.

El vicecoordinador del PAN Alberto Pérez Cuevas, aseguró que no se trata de que los medios no informen, o de que informen lo mismo: no se trata de limitar la libertad de expresión, si alguien piensa en eso creo que es un error; el país requiere esa responsabilidad.

Por su parte, Mauricio Toledo, diputado perredista interpretó la firma del acuerdo como la institucionalización de la autocensura, y la instauración de una nueva etapa en la política del miedo social.

Olvidan los operativos en directo

Jorge Rojo García de Alba (PRI) adujo que con un convenio entre medios de comunicación de tal envergadura y contenido, flaco favor le hacen a la democracia, porque el problema no es que se informe de la violencia, sino la enorme y preocupante ignorancia que los medios de comunicación masiva han propiciado en los sectores más amplios de la sociedad; eso es verdaderamente lo que nos tendría que tener preocupados, ¡eso sí daña profundamente al ser nacional!

El representante priísta por el estado de Hidalgo responsabilizó a un sector de medios de comunicación masiva de propiciar la cultura de la violencia. “Desde hace por lo menos una década han lucrado con el escándalo, con operativos transmitidos en directo, defenestración de personas y personajes públicos y la difusión de imágenes grotescas que son producto de la irracionalidad de los delincuentes; ahora pretenden uniformar el criterio de la sociedad con una nueva actitud frente a la violencia, así no se alcanzará el control de las instituciones del Estado sobre aquellos que violan constantemente la legalidad”.

Toledo insistió en que los medios de comunicación, junto a las instituciones del Estado, deben asumir su responsabilidad en los altos índices de violencia que se registran todos los días en el país.

“No se han cansado, por lo menos desde hace una década, de infundir miedo entre la población, y consecuentemente han propiciado una cultura de la narcoviolencia. Resulta inaudito para quien tenga dos dedos de frente creer que ahora se modificarán las actitudes de las empresas de comunicación que han sido las principales beneficiarias del decaimiento y la mediocridad de la sociedad.”

Por el contrario, Alberto Pérez Cuevas Refirió que el país está viviendo una situación de violencia que se tiene que atender.

–Las televisoras han hecho apología de la violencia y hoy pretenden dar marcha atrás, ¿qué mensaje están mandando?

–Yo me quedaría con el asunto de que en este momento el país requiere responsabilidad en los principios de información y comunicación para evitar un ambiente de desesperanza, de desánimo y de crudeza. Tenemos que ser puntuales en que cada medio de comunicación y cada empresa haga un análisis de lo que ha hecho antes y de lo que tendrá que hacer ahora.