En Puebla urge rescatar al toro, a buenos toreros y a nuevos aficionados: Juan Huerta Ortega
o se puede creer que desde el fallecimiento de Antonio Campos El Imposible, hace 46 años, no haya surgido en la ciudad de Puebla un torero con arrastre, capaz de apasionar y enorgullecer a la afición poblana, y que sucesivas administraciones de la plaza de toros El Relicario-Joselito Huerta tampoco hayan tenido el olfato y el taurinismo para descubrir, apoyar y proyectar a ese tipo de torero, el único que, junto con el toro, puede devolverle interés masivo a la fiesta brava.”
Habla el ganadero, empresario taurino y director de Protauro SA de CV, Juan Huerta Ortega, uno de los hijos del legendario productor e introductor de pulque, exitoso hombre de negocios y sensible ganadero de bravo don Reyes Huerta Velásquez, quien fundó en 1941 la ganadería de Soltepec y en 1948 el hierro que lleva su nombre, inculcándoles a sus vástagos el amor y el respeto por su tierra y por el toro bravo como patrimonio cultural de México.
Como hermano mayor, siempre me ha tocado arreglar lo que él rompe
, agrega entre broma y veras Juan Huerta, al referirse al empresario anterior del coso poblano, José María Arturo Huerta, quien durante todo el sexenio del tristemente célebre góber precioso, Mario Marín, se dedicó a lidiar ganado chico, mayoritariamente de su ganadería, y a dar festejos sin ton ni son, de espaldas a la afición poblana, pero atento a sus intereses y a una visión estrecha y cortoplacista del espectáculo.
“Un empresario de toros, al igual que un gobernante, añade Juan, es respetado en la medida de su eficiencia y capacidad de servicio. Si quedo al frente de El Relicario no pienso lidiar mi ganado en esta plaza, sino rencauzar la fiesta en la ciudad; los buenos ejemplos cunden más que los malos. En la primera corrida como arrendador de la plaza trajimos a Diego Ventura y a un buen torero que ha toreado poco, Juan Luis Silis, quien dejó buen sabor, con cuatro toros muy serios de San Marcos. Y el viernes primero de abril viene una imponente corrida de Santa María de Xalpa para El Cejas, El Payo y El Capea.
“Quiero recuperar al toro auténtico, a buenos toreros marginados y a una afición nueva que se merece todo el respeto si queremos que se vuelva asidua al espectáculo. Hay una afición en potencia que no ha sido aprovechada. Aquí está enterrado don Reyes. A él y a Puebla les debo respeto por su tradición ganadera y taurina. Estamos esperando a que el gobierno estatal nos confirme la concesión de la plaza, pues falta muy poco para la feria, que es en mayo.
Marín dejó a Puebla tres años sin feria. No se vale. Como tampoco se vale que la fiesta en nuestra ciudad siga a merced de todo excepto del toro. La fiesta de cada localidad tiene que estar en manos de gente del lugar, pero además eficazmente comprometida con su comunidad y con su tradición taurina. Por eso hay que saber honrar la memoria de nuestros antepasados. El país está demandando otras reglas de juego y no sólo en los toros. Ello obliga a los profesionales a ser imaginativos y a proponer al gobierno proyectos inteligentes y rentables.
Estamos haciendo el padrón de toreros poblanos
, añade entusiasmado Huerta, quien a los 62 años parece de 40, a quienes pedimos un currículum e imágenes de sus actuaciones. Asimismo, agrega, “en mayo pensamos inaugurar la Academia Municipal Taurina, pues de lo que estoy convencido es que para recoger primero hay que sembrar y hacerlo con idea, confianza en lo nuestro y grandeza de miras. De otro modo seguiremos con la mentalidad acomplejada de que sólo lo de fuera es bueno y lo nuestro tiene que ser mediocre.
Otro reto que nos hemos impuesto es traer de nuevo a la familia a la plaza, no sólo a los jóvenes los viernes por la noche. Se trata de que la fiesta de toros cohesione a la familia, no que la divida. ¿Cómo? Haciendo valer la rica tradición taurina de Puebla, trayendo al toro y poniendo a sus toreros. Quien no sabe hacer toreros, tampoco sabrá disfrutarlos. Protauro se ha propuesto ser líder empresarial taurino, sin separar el negocio de la verdad del toreo a partir del toro.