Entre los ecos de la consulta realizada el domingo para definir si el PRD y el PAN se coligan en la búsqueda de la gubernatura del estado de México, y ante la reiterada determinación de Alejandro Encinas de no aceptar ser postulado por esa alianza, ayer se escucharon voces como la del secretario del Trabajo y militante blanquiazul, Javier Lozano, para asegurar que su partido no necesita ni le interesa el perredista.

Insistió en el incumplimiento por parte de Encinas de los requisitos de residencia mínima para ser elegible como candidato en esa entidad: No nos hace ningún favor, apuntó. El perredista, fustigó Lozano, deshojó la margarita, como lo hizo Andrés Manuel López Obrador, quien tampoco cumplía los requisitos y se aferró a ser jefe de Gobierno (en el Distrito Federal) sólo por capricho.

También habló el dirigente nacional del PRI, Humberto Moreira, para quien la poca convocatoria que lograron anteayer ambos partidos opositores, es una buena noticia. El virtual candidato del tricolor, Eruviel Ávila, en un solo municipio obtuvo más votos –dijo– que todos los obtenidos por el PRD y el PAN en el estado.

Con más cautela, el coordinador del PRI en el Senado, Manlio Fabio Beltrones, si bien desestimó los resultados de la consulta, apuntó: Nadie puede menospreciar la fuerza de un partido, en este caso de oposición. Y a quienes les pareció exigua la participación en la consulta, les señaló: Eso ya lo resolverán las oposiciones que unidas intentan ponerse en condiciones de competencia ante un partido y un candidato del PRI con enormes posibilidades de ganar.

En Querétaro, el diputado José Narro Céspedes (PRD) insistió en que la alianza obedece a una estrategia para no permitir la restauración autoritaria del PRI. Asimismo, en el estado de México, algunos precandidatos perredistas consideraron que podrían darse las condiciones políticas para elegir al abanderado de la alianza PAN- PRD dentro de la sociedad civil, si Alejandro Encinas Rodríguez insiste en su actitud de no ser el candidato de la coalición.

Octavio Martínez Vargas, líder estatal de la corriente del sol azteca Nueva Izquierda, así como los precandidatos perredistas José Luis Gutiérrez Cureño y Jaime Enríquez, dijeron que la ventaja de Encinas lo convierte en el indicado para encabezar la alianza PRD-PAN, pero de no aceptar existe la probabilidad de postular a un ciudadano mexiquense notable.

Asimismo, el líder local del PRD en Nezahualcóyotl, Juan Zepeda Hernández, admitió que la alianza traerá la inevitable ruptura en su partido, pero el costo político se tiene que pagar, pues no puede defraudarse a quienes están en favor de esa coalición.