Hombres armados intentaron levantar este viernes a una pareja integrante de la caravana de migrantes centroamericanos Paso a paso por la paz, que el miércoles salió de Ciudad Ixtepec, Oaxaca, rumbo a la ciudad de México, donde se integrará a la marcha convocada por el poeta Javier Sicilia.

La agresión ocurrió en Córdoba, Veracruz, donde los manifestantes, que adoptaron el lema También los migrantes estamos hasta la madre, esperaban abordar la bestia, el tren que los llevaría a la ciudad de Puebla, explicó Rubén Figueroa, del Movimiento Migrante Mesoamericano.

Eran cerca de las 13 horas cuando una camioneta negra, con placas XR 73 223, del estado de Veracruz, se detuvo frente a la pareja que fue a comprar un refresco a una tienda cercana, y ahí llegaron tres hombres, pelones, con tatuajes en las manos, que intentaron subirla al vehículo.

Debido a la presencia de representantes de los medios de comunicación y el revuelo que causó el intento de secuestro a plena luz del día, los agresores huyeron.

Pese a las denuncias que hicieron ante autoridades, horas después no había llegado ningún soldado ni policía federal. El tren pasó lo más rápido que pudo, de forma que no nos pudiéramos subir. Por ello, Figueroa pidió que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos investigue lo que pasa aquí.

Dijo que la caravana no se detendrá ni cambiará su ruta: sabemos que día con día la delincuencia organizada ejerce su control en toda la ruta migrante: secuestrar, violar, torturar y matar es la fórmula preferida del crimen organizado. Hoy quedó en un intento, pero ¿cuántos hechos como el que vivimos en nuestras narices existen sin que nadie se entere?, se preguntó.

La Caminata-Marcha por la Paz con Justicia y Dignidad fue escoltada por policías de la SSP del DF a partir del kilómetro 46 de la autopista Cuernavaca-México con rumbo a TopilejoFoto Francisco Olvera

Este viernes, los más de 100 migrantes y activistas que viajaron en el tren desde Ixtepec hasta Medias Aguas, Veracruz, y posteriormente a Tierra Blanca, pernoctan en la iglesia de San José, en Orizaba, Veracruz, debido a que los maquinistas pasaron lo más rápido posible y con ello les impidieron abordar el tren.

Elvira Arellano, de Familias Latinas Unidas Sin Fronteras, dijo: exigimos al gobierno federal que se brinden las garantías de seguridad, para ejercer nuestro libre derecho a la manifestación plasmado en nuestra Carta Magna, para la caravana y cada uno de sus integrantes y al mismo tiempo lo responsabilizamos por cualquier incidente en contra de la caravana y sus integrantes.

Explicó que el jefe de la policía del lugar les manifestó que solamente cuenta con tres patrullas para vigilar toda la población y que por ello no podía garantizar la seguridad de quienes integran la caravana.

Rubén Figueroa informó que la única seguridad que les ha brindado el gobierno federal son tres elementos de la Agencia Federal de Investigación que llegaron a hacer acto de presencia y se retiraron igual que algunos integrantes de la Policía Federal, que sólo les preguntaron qué era lo que querían.

Con información de Octavio Vélez y Fernando Camacho, corresponsal y reportero