Joplin, 23 de mayo. El tornado más mortífero en Estados Unidos en más de 50 años arrasó una ciudad de Misuri, en el centro del país, y dejó al menos 116 muertos, cientos de heridos y una estela de destrucción, indicaron el lunes las autoridades. El tornado azotó la ciudad de Joplin, cerca de la frontera con Oklahoma y Kansas, la noche del domingo, menos de un mes después que una serie 150 fenómenos similares dejó 354 muertos en el sureste de la nación.

Dos mil viviendas quedaron destruidas en esta ciudad de 50 mil habitantes, donde también resultaron muy dañadas iglesias, escuelas y el hospital local St. John’s Regional Medical Center, que tuvo que trasladar a 183 pacientes a otros centros médicos.

Jay Nixon, gobernador de Misuri, declaró el estado de emergencia y llamó a la Guardia Nacional a apoyar a los servicios de urgencia y a movilizar a otras agencias estatales.

El presidente estadunidense, Barack Obama, de viaje en Irlanda, llamó hoy a Nixon para manifestarle sus condolencias y en un comunicado difundido por la Casa Blanca extendió el pésame a los familiares de los fallecidos.

Michelle y yo enviamos nuestras profundas condolencias a las familias de quienes perdieron la vida en los tornados que golpearon Joplin, dijo. Además ordenó al administrador de la agencia de emergencias del país (FEMA), Craig Fugate, que se traslade de inmediato a Misuri para asegurarse de que el estado tiene todo el apoyo que necesita, dijo un vocero de la Casa Blanca desde Dublín.

Según la cadena CNN, a primera hora del lunes equipos de rescate con cientos de perros peinaban la zona reducida a escombros en la parte sur de la ciudad, cuya situación emperó por varios incendios provocados por fugas de gas.

Las autoridades explicaron que la senda de destrucción en Joplin abarca kilómetro y medio de ancho por diez kilómetros de largo.

Según el Servicio Meteorológico Nacional, unos 46 tornados golpearon el fin de semana siete estados del centro y el norte de Estados Unidos.