En horas recientes fueron descubiertos o cometidos al menos 69 asesinatos en todo el país, de los cuales 13 correspondieron a Jalisco, 14 a la Comarca Lagunera y 15 a Chihuahua.

Entre las ejecuciones de Chihuahua figuran las de Margarita Palma Valdenegro, de 65 años; Paula Chaparro Palma, de 22; una joven de 15 y dos niños de tres y cuatro años –que pertenecían a la misma familia–, perpetradas en el poblado de Terreros, del municipio de Guadalupe y Calvo, en los linderos de Sinaloa y en plena sierra Tarahumara.

El padre y el abuelo sobrevivieron al ataque de hombres armados que irrumpieron a su domicilio en busca de uno de los hijos, y al no hallarlo dispararon a mansalva con rifles de alto poder. Otras dos víctimas fallecieron en un tiroteo contra el bar Las Quintas, en la capital chihuahuense; mientras en el Terraza, del municipio de Aldama, un hombre de 25 años también fue abatido a tiros.

Una de las ejecuciones fue cometida en Ciudad Juárez, y con ella la cifra de muertes violentas rebasó las mil por cuarto año consecutivo, y se elevó a nueve mil 39 el número de bajas desde enero de 2008, cuando inició la guerra de narcotraficantes por el control de la urbe fronteriza, según recuentos oficiales.

En los municipios conurbados de Torreón, Coahuila, y Gómez Palacio, Durango, que junto a otros 10 conforman la Comarca Lagunera de ambas entidades, fuentes policiacas reportaron que entre los asesinatos hubo al menos ocho en la primera de las localidades, que incluyen los de cinco convidados a una fiesta de cumpleaños en un taller mecánico de la colonia Braulio Fernández Aguirre, y seis fueron de hombres baleados en la ciudad vecina, cinco de ellos en la colonia Eduardo Guerra.

Entre las muertes de Jalisco se encuentran las de cuatro hombres en el municipio de Tototlán, cuyos cadáveres quedaron a un costado de la carretera a Atotonilco. Las víctimas descendían de una camioneta cuando fueron interceptadas por sujetos, que las alcanzaron en otros vehículos, para disparar en su contra.

Aparte de los 42 reseñados, hubo 27 homicidios más en otras entidades. Nuevo León tuvo seis: los de dos reos del penal del Topo Chico y un decapitado en la plaza de la colonia Venustiano Carranza, de Monterrey, así como las de tres descuartizados, cuyas cabezas desolladas aparecieron junto a un mensaje no revelado en una banca de la entrada a General Terán, y las restantes extremidades sobre la calle Zaragoza de la misma cabecera municipal.

En Guerrero hubo ocho muertes, cinco de ellas en Acapulco, y la del sicólogo y terapeuta José Reynosa Álvarez, de 47 años, el sábado en la colonia Centro de Chilpancingo.

Entre las cinco ejecuciones de Sinaloa se contaron las del marino Paul Mizraim Flores Balmaceda y el abogado Fidel Rosete: el primero apuñalado y el segundo tiroteado en distintos hechos en Mazatlán.

La policía municipal de Nezahualcóyotl, estado de México, informó del deceso de un sujeto durante un tiroteo en la colonia Impulsora. En Baja California hubo cuatro asesinatos, y los restantes tres fueron cometidos en Nayarit. Estas últimos incluyeron el de un hombre identificado como Juan Antonio Santa Ayala, de 50 años, cuyo cadáver apareció dentro de un auto con placas de California, Estados Unidos, tras una balacera escenificada en la calle Tenochtitlán, de Tepic.

En el nayarita municipio de Ixtlán del Río militares incautaron 2.5 toneladas de mariguana y detuvieron a cinco sujetos que las transportaban.

En Villahermosa, Tabasco, dos individuos que se desplazaban en una motocicleta lanzaron una granada al centro administrativo del ayuntamiento de Cárdenas, que al detonar dejó al menos ocho vehículos dañados la madrugada del sábado.