Después de vaivenes en una jornada muy volátil, el principal indicador de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) logró repuntar y recuperarse parcialmente después del desplome que sufrió la víspera junto con los mercados accionarios internacionales, al culminar con una alza de 1.13 por ciento, equivalente a 375.24 unidades, lo que significa el noveno ascenso más importante en lo que va del año.

Después de presentar alta inestabilidad, que provocó que el principal indicador de la BMV cayera hasta los 32 mil puntos a la mitad de la sesión bursátil, el Indice de Precios y Cotizaciones (IPC) se recuperó apoyado por el aumento en las acciones del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA- Bancomer); del grupo Fomento Mexicano (Femsa); del Grupo Carso y de Walmart, con lo que cerró en 33 mil 697.87 puntos, nivel similar al que registraba el 30 de septiembre de 2010.

Con cuatro jornadas negativas y una sola alza en la semana, el balance es negativo en el periodo, con una pérdida de 6.39 por ciento, con lo que se convierte en el peor desempeño semanal desde octubre de 2009, cuando se enfrentaba la recesión detonada en Estados Unidos por la crisis hipotecaria. Así, en lo que va del año registra un retroceso acumulado de 12.59.

Por su parte, el dólar para operaciones al mayoreo entre bancos, casas de bolsa, casas de cambio y empresas, se vendió en 11.9910, contra los 12.0100 observados la víspera. Es decir, una apreciación de 0.16 por ciento. En el mercado libre, el dólar se vendió en ventanillas de bancos y casas de cambio en 10.15 pesos, cinco centavos más que el jueves pasado.

Analistas afirmaron que la volatilidad en el tipo de cambio fue resultado de la venta de las posiciones largas en pesos en el mercado de futuros de Chicago para obtener liquidez e invertir esos recursos en bonos más seguros.

Ernesto O Farril, director de la consultoría Bursamétrica, explicó a La Jornada que la volatilidad observada en los mercados internacionales durante la semana fue la peor desde septiembre de 2008.

Consideró que hay una sobrerreacción negativa ante un nuevo embate especulativo contra España e Italia, porque se considera que no es suficiente el fondo de estabilización por 440 mil millones de euros que han puesto los europeos.

Segundo, han salido algunos indicadores económicos de Estados Unidos donde se nota cierta desaceleración y se confirma que Standard and Poor's (S&P) redujo la calificación de la deuda de ese país.

Estimó que para que esta situación termine debemos dejar que los gobiernos europeos dupliquen el tamaño de su fondo de estabilización. Si estos dos elementos fallan podría profundizarse la crisis y convertirse en un serio problema para la supervivencia del euro, y entonces sí se podría adelantar que viene una recesión mundial Lo más probable es que Estados Unidos incremente su deuda y creemos que los mercados ya tocaron fondo.