La fracción del PRI en el Senado demandó al gobierno transparentar los más de 369 fideicomisos de los que se tiene conocimiento, ya que suman cerca de 336 mil millones de pesos y son operados de manera discrecional y opaca.

Uno de esos fideicomisos es el que se constituyó para la liquidación de Luz y Fuerza del Centro, con 2 mil 900 millones de pesos, y en el que la Auditoría Superior de la Federación detectó diversas irregularidades.

A nombre de su bancada, la senadora Socorro Quiroz precisó que el tema lo llevó ya a la Comisión Permanente, ya que Felipe Calderón, por medio de la figura del fideicomiso, maneja a su antojo recursos millonarios. En lo que va del sexenio, dijo, el Ejecutivo federal creó 75 nuevos fideicomisos.

Precisó que presentó en la pasada sesión de la Permanente un punto de acuerdo con el propósito de que ese órgano del Congreso solicite a las secretarías de Hacienda y Crédito Público y de la Función Pública, un informe detallado del número de fideicomisos que opera el Gobierno Federal desde 2006, así como el total de recursos ejercidos en ellos y su destino.

Precisó que de acuerdo con reportes de la Secretaría de Hacienda, al cierre del 2010 el gobierno federal tenía registrados 369 fideicomisos que operaban cerca de 335 mil 889 millones de pesos, lo que representa 10.5 por ciento del gasto total neto autorizado para el correspondiente ejercicio fiscal.

La figura de fideicomiso, insistió, pasó de ser un auxiliar del Poder Ejecutivo para el cumplimiento de sus tareas, a un instrumento para disponer discrecionalmente de miles de millones de pesos con poca claridad.

Precisó que con base en diversos reportes se calcula que unos 75 fideicomisos se constituyeron en este sexenio, pero admite que se desconoce el número exacto de los mismos. De acuerdo con declaraciones recientes del secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, operan 364 fideicomisos, que disponen de 359 mil 551 millones de pesos, pero 84.4 por ciento de ese monto se concentra en apenas 25 instrumentos.

La senadora Quiroz recalcó que la Secretaría de Hacienda tiene una enorme responsabilidad en ello y debe aclarar detalladamente el destino de esos recursos que provienen de los impuestos de los mexicanos y no se pueden administrar con tal opacidad, sin saber si realmente son ejercidos en proyectos para impulsar áreas prioritarias del país.