La derrama económica de los turistas extranjeros bajó 3.21 por ciento en el primer semestre del año frente a igual periodo de 2010, debido a un descenso en el número de visitantes, el entorno económico adverso en Estados Unidos y la inseguridad pública en México.

Así, en ese periodo los ingresos por turismo extranjero se ubicaron en 6 mil 178.5 millones de dólares, mientras en los primeros seis meses del año pasado fueron de 6 mil 383.2 millones, de acuerdo con datos del Banco de México (BdeM).

La derrama en el primer semestre es la segunda más baja en ocho años, después de la sufrida tras el desplome de 2009 por los efectos de la crisis hipotecaria de Estados Unidos y la contingencia sanitaria por la epidemia de influenza.

El banco central registra mensualmente el número de viajeros que ingresan a territorio nacional, así como la derrama económica y el gasto promedio de los visitantes.

Difunde de igual forma los datos correspondientes a los mexicanos que viajan al exterior en sus indicadores sobre balanza de pagos.

El BdeM divide en tres grandes grupos a los viajeros internacionales que ingresan: los turistas no fronterizos (de internación), los fronterizos –a la vez subdivididos en sin pernocta y con pernocta– y los visitantes en crucero.

Los turistas no fronterizos son quienes ingresan vía aérea, y representan el segmento más importante para la Secretaría de Turismo, pues son los que mayor derrama económica generan en comparación con los viajeros fronterizos con y sin pernocta y los cruceristas.

Sin embargo, el mayor flujo de personas lo representa el segmento de viajeros fronterizos.

Seis millones 602 mil turistas no fronterizos ingresaron al país entre enero y junio, lo cual significó una disminución de 1.91 por ciento frente a 6 millones 731 mil en los primeros seis meses de 2010, y representó el nivel más bajo desde 2006.

Las llegadas de los viajeros fronterizos sin pernocta –los que retornan a Estados Unidos el mismo día– cayeron 12.47 por ciento (23.7 millones de personas) y de cruceristas 9.35 por ciento (3 millones).

Paradójicamente, los turistas fronterizos con pernocta (quienes ingresan en auto al territorio y se alojan al menos una noche) aumentaron 11.4 por ciento (4.8 millones).

La suma de estos segmentos totalizó unos 38.2 millones de personas, es decir, una caída de 8 por ciento frente a 41.5 millones viajeros reportados en el periodo enero-junio del año pasado, y representó el registro más bajo desde 1991.

Los problemas de inseguridad ya tocaron al turismo, advirtió el presidente de la Confederación Nacional Turística, Miguel Torruco Marqués, empresario con 40 años laborando en el sector, al comentar la baja en el número de turistas no fronterizos.

Además de la inseguridad, dijo, otros factores que contribuyeron a la caída son la nula actualización del producto turístico y la desaceleración económica en Estados Unidos, el principal mercado emisor de viajeros hacia México.

El empresario consideró que al cierre de 2011 un deslizamiento en el tipo de cambio del peso frente al dólar incrementará la captación de divisas.

Un dólar a 13 pesos en los próximos meses será favorable para el sector y se lograría una captación superior a 12 mil millones de dólares al cierre del segundo semestre, estimó Miguel Ángel Cardona, académico del Tecnológico de Monterrey.

Agregó que el incremento en el número de turistas fronterizos con pernocta obedece a la estrategia de seguridad realizada por el gobierno federal en esa zona.