Milán. El segundo paquete de austeridad italiano en menos de un mes encontró un serie de críticas el día después de convertirse en ley, con la mayor federación sindical, la cual amenaza con una huelga general por lo injusto de las medidas. Con este nuevo plan de austeridad, que prevé economizar unos 45 mil 500 millones de euros en dos años, el gobierno espera poner fin a los ataques especulativos en los mercados financieros contra Italia. Estas nuevas medidas se suman a las adoptadas a mediados de julio por el Parlamento por un total de unos 48 mil millones de euros. Una oportunidad perdida, fue el comentario del jefe economista de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico en París, Pier Carlo Padoan, en el periódico La Stampa, el domingo.