Los países que no entienden que el desarrollo se basa en el conocimiento están condenados al concomitante rezago, al viejo papel de proveedores y exportadores de mano de obra barata y al de productores de materias primas no renovables o de mercancías cíclicas, sujetas a los vaivenes de la economía globalizada, advirtió la directora general del Instituto Politécnico Nacional (IPN), Xolochóchitl Bustamante.

En la celebración del décimo aniversario de la fundación de la revista politécnica Conversus, realizada en el museo Soumaya, destacó que los recursos públicos no alcanzan el mínimo de lo que el país requiere, pero debe entenderse que el crecimiento y desarrollo económico del país no podrá darse sin el concurso de la ciencia.

Recordó que hace unos días los rectores y directores de las instituciones de educación superior presentaron ante diputados federales una propuesta de presupuesto plurianual para establecer planes y programas de largo alcance, lo que, de aprobarse, sería un gran logro para el desarrollo científico, porque en las casas de estudio se genera el mayor número de proyectos de investigación, y la participación del sector productivo, principal beneficiario de sus resultados, todavía es incipiente e insuficiente.