En conferencia de prensa Paula Astorga Riestra, directora de la Cineteca Nacional, dio a conocer el proyecto Archivo memoria, que pretende rescatar la documentación histórica y social de México mediante testimonios fílmicos. Ella dijo: Es una ambiciosa iniciativa que busca recopilar, preservar y difundir los archivos fílmicos olvidados, que algunos historiadores cinematográficos han denominado cine huérfano; con tres proyectos creativos de cineastas y artistas contemporáneos a partir de los archivos recuperados.

A este proyecto se suman, además de la Cineteca Nacional, el Orphan Film Project y Walter Forsberg. Además se llevará a cabo, el 26 y 27 de agosto, el primer Encuentro de Archivo Memoria.

Esos días se mostrarán los resultados alcanzados en el Orphan Film Project Symposium, junto con los hallazgos del proyecto Archivo memoria y los primeros cortometrajes realizados por los investigadores Kyzza Terrazas e Issa García Ascot.

Proyección de trabajos

Ambos programas, titulados La historia olvidada y Cine arte, respectivamente, exhibirán entre otros trabajos: Berlín 1936 Olympics Home Movies (10 minutos (video/1936), de la Universidad de Nueva York; Carta a un ingeniero, de Kyzza Terrazas (10 minutos/video/2011), de la Cineteca Nacional; Cine Móvil (13 minutos/16mm/1976).

Otros trabajos que se proyectarán son Selecciones de Archivia Films (30 minutos/16mm/devedé); A trip Down Market, de The Mills Brothers (12 minutos/videodigital/1906), de los Archivos Prelinger, y Muestra de material del archivo Luis Osorio Barona (25 minutos/video).

Además, Un modo de decir, de Issa García Ascot (7 minutos/video), de Cineteca Nacional, y La segunda primera matriz, de Alfredo Gurrola (14 minutos/video/1972).

Astorga Riestra subrayó que desde el comienzo de su administración iniciativas como ésta han sido prioridad. Así, Archivo memoria emprende la búsqueda de registros de imágenes de aquello no visto, que forma también parte de la historia fílmica nacional, como son películas de fiestas familiares, bautizos, bodas y primeras comuniones.

Añadió que también se contemplan los noticieros, el cine turístico, filmes industriales, material censurado, cine educacional, campañas políticas, obras experimentales, pruebas de cámara, grabaciones bélicas, stock, animaciones, pietake antropológico y fragmentos efímeros.

Lo que pretendemos es consolidar a la Cineteca como espacio de reflexión con todo lo que se logre rescatar. Habrá solamente dos restricciones para no recibirlo y digitalizarlo, por ejemplo, que el material este avinagrado o contaminado con hongos, entre otros.

Mediante el rescate de los materiales se busca encontrar registros que dejen ver el contexto en el que fueron creados, y que en conjunto reflejen los cambios por los que ha transitado la sociedad mexicana, desde 1906 a 2011.

Por su parte, Catherine Bloch, subdirectora de Investigación de la Cineteca, dijo que la importancia de los archivos es indagar las razones por las cuales en los inicios del cine a nadie pareció interesarle todos esos materiales huérfanos.

Se dijo que se busca esencialmente que esos materiales puedan ser reutilizados por los cineastas mexicanos contemporáneos, bajo el estricto consentimiento de los propietarios de los filmes.

Subrayó que entre los trabajos que se han emprendido destacan los efectuados por Kan Jacobs, Gustav Deutsch, Craig Baldwin, Jesse Lerner, Gregorio Rocha, Angela Ricci Lucchi y Yervant Gianikian, quienes han sabido apreciar el justo valor de esas memorias rescatadas.

De entre los trebejos

Actualmente, se informó durante la conferencia, existen tres materiales preciados como parte de los rescates: Metrópolis, de Fritz Lang; Los olvidados, de Luis Buñuel, y El mago de Oz, de Victor Fleming.

Audrey Young, encargada del proyecto Archivo memoria, dijo que el cine huérfano siempre ha existido, pero no fue hasta los años 90 cuando algunas personas se dieron a la tarea de rescatar esos acervos, prácticamente de la basura, pero con su labor se generó una conciencia que dio paso al rescate formal de los materiales en el mundo.

Al final de la conferencia se proyectaron los filmes de Kyzza Terrazas e Issa García Ascot, quienes los realizaron con materiales rescatados entre los trebejos de sus familias. Ambos cineastas comentaron que se trata de ponerlos a disposición del público, pero sin editarlos, como forma de mostrarles el pasado social.