Junto a la unánime condena y repudio de los partidos representados en el Congreso de la Unión a lo ocurrido en Monterrey, surgieron voces como la del líder de los senadores del PRI, Manlio Fabio Beltrones Rivera, censurando cualquier intento de aprovechar políticamente tal circunstancia. Cuando hay un crimen y entra la política por una puerta, la justicia sale por la puerta de atrás, alertó.

En San Lázaro, la mesa directiva de la Cámara de Diputados exigió a las autoridades competentes el esclarecimiento del atentado y el castigo a los responsables con la aplicación de la ley.

Repudiamos tales acontecimientos que sacuden no solamente a Monterrey y a Nuevo León, sino a todos los mexicanos, toda vez que se trata de uno de los hechos de violencia más crueles que se han registrado en territorio nacional. Lo ocurrido es una tragedia en donde una vez más mueren personas inocentes a manos de un grupo armado, resaltó el gobierno cameral.

En ese órgano legislativo, y por separado, Carlos Rojas, coordinador del PRI; Josefina Vázquez Mota, del PAN, y Pedro Vázquez González, del PT, calificaron de crimen imperdonable el atentado perpetrado el jueves donde murieron más de 50 personas.

Llamaron a construir una unidad inquebrantable y, particularmente el PRI, pidió no lucrar con esta tragedia. Ante la barbarie, participación ciudadana, subrayó este partido.

Vázquez González, por su parte, pidió no justificar los casi 50 mil muertos ocurridos en esta lucha absurda contra el crimen organizado responsabilizando al Congreso de incumplimiento e irresponsabilidad.

En Contepec, Michoacán, donde efectuaron su reunión plenaria, los senadores del PAN llamaron a no repartir culpas. El coordinador José González Morfín y los senadores Fernando Elizondo, Alejandro Zapata y Juan Bueno Torio, secundaron las expresiones del presidente Felipe Calderón y rechazaron además el llamado del ex mandatario Vicente Fox para establecer una tregua con las bandas criminales.

Elizondo, quien fuera candidato del PAN al gobierno de Nuevo León en la reciente elección de esa entidad, apuntó: Si el estado se retrae de la lucha contra la delincuencia organizada, la violencia va a empeorar; lo que hay que hacer es afinar estrategias, no plantear negociaciones con delincuentes.

En la ciudad de México, el senador Beltrones participó en la clausura de la XX Reunión Nacional y IV Congreso Internacional de Magistrados y ahí destacó: Éste no es un momento para repartir culpas, sino de encontrar mucha unidad y comprensión entre nosotros.

Se manifestó convencido de que el presidente Felipe Calderón siente mucha pena y dolor por este atentado como para andar pensando en lucrar.

Finalmente, en el Senado de la República, el PRD advirtió que no basta con condenar el atentado de Monterrey. Se requiere una respuesta contundente del Estado mexicano; una señal inequívoca a los delincuentes de que no va a quedar impune su crimen y de que la sociedad no se va a dejar vencer o amedrentar.

Carlos Navarrete, coordinador de este grupo legislativo demandó revisar cómo operaba el casino Royale y todos los que hay en el país y de ser necesario, emitir las sanciones correspondientes contra aquellos que no cuenten con las autorizaciones debidas y las medidas de protección necesarias.