Washington, 7 de septiembre. “Los cárteles mexicanos, sobre todo el de Sinaloa, dominan el suministro y venta de droga en Estados Unidos, por medio de la frontera suroeste de este país, donde la demanda de enervantes ilícitos está aumentando, sobre todo entre los jóvenes”, según un informe del Departamento de Justicia.

Las organizaciones delictivas trasnacionales con base en México dominan el suministro, tráfico y distribución al por mayor de casi todas las drogas ilícitas en Estados Unidos, señala la Evaluación de la amenaza nacional de la droga 2011, publicada hoy por el Departamento de Justicia.

Señala que de los siete principales cárteles mexicanos, el de Sinaloa es preminente en esta actividad, y su extensa red de distribución proporciona drogas a todas las regiones del país, subraya el informe.

Entre 2009 y 2010, los cárteles mexicanos operaban en más de mil ciudades estadunidenses.

Aunque organizaciones criminales de otros países también logran introducir drogas al país, ninguna impacta el mercado de narcóticos de forma tan significativa como las mexicanas, de acuerdo destaca el estudio, según el cual este dominio mexicano se debe a su control de las rutas de contrabando por medio de la frontera suroeste estadunidense, así como a su capacidad para producir, transportar y/o distribuir cocaína, heroína, mariguana y metanfetaminas.

Agrega que son ventajas competitivas que no se prevé que vayan a cambiar de forma significativa en el corto plazo, lo que garantiza el dominio de las organizaciones criminales trasnacionales con base en México, al menos para los próximos años.

En líneas generales –destaca–, la frontera con México sigue siendo el principal punto de ingreso de estupefacientes al país, en su mayoría por tierra, aunque la creciente seguridad fronteriza parece estar forzando a los narcotraficantes a aumentar el uso de métodos alternativos, como naves no comerciales y aviones ultraligeros. Los narcotraficantes están respondiendo a los esfuerzos antinarcóticos del gobierno modificando sus relaciones internas, alterando los niveles de producción de drogas y ajustando sus rutas de trasiego y sus métodos, agrega el estudio.

Asimismo, destaca que la demanda de drogas en Estados Unidos, especialmente de heroína, mariguana y metanfetaminas, está aumentando, sobre todo entre los jóvenes.

Según esta última evaluación, alrededor de 8.7 por ciento de los estadunidenses de 12 o más años –unos 21.8 millones de personas– eran consumidores de drogas ilícitas en 2009, lo que supone un aumento significativo en relación con el 8 por ciento registrado un año antes.

El mayor grupo de consumidores son los jóvenes de entre 18 y 25 años, agrega el estudio, según el cual, en 2007 el coste económico del uso de enervantes ilícitos para la sociedad ascendió a más de 193 mil millones de dólares.