No habrá la llamada final de ensueño
Domingo 11 de septiembre de 2011, p. a19
Nueva York, 10 de septiembre. El serbio Novak Djokovic, primer raqueta mundial, salvó un doble punto de partido para venir de abajo y derrotar al suizo Roger Federer por 6-7 (7-9), 4-6, 6-3, 6-2 y 7-5, y disputará su segunda final del Abierto de tenis de Estados Unidos, último Gran Slam del año, en la que tendrá de frente al campeón defensor y sembardo número dos del mundo, el español Rafael Nadal, quien se encargó de eliminar al escocés Andy Murray (4), 6-4, 6-2, 3-6 y 6-2.
Djokovic, que había caído ante Fededer en la final del US Open 2007, se tomó una dulce venganza al negarle al suizo el camino a la conquista de su sexto título de Flushing Meadows y su título número 17 de un Gran Slam.
Fue un increíble partido. Roger jugó a gran altura, y yo supe esperar mi momento para darle vuelta. Estoy contento y le pido al público que baile conmigo para festejarlo
, expresó Djokovic al pie de cancha.
Al ritmo de la música el Nole comenzó a bailar, acompañado por las palmas del público, que estuvo dividido en su apoyo ante los dos grandes tenistas.
Luego de perder los dos primeros sets del encuentro, el serbio levantó en su juego y a dos puntos de perder el partido volteó los obstáculos para ganar los últimos cuatro games en sucesión y conseguir su cuarta victoria en cinco partidos contra Federer este año.
La victoria acortó 14-10 los enfrentamientos particulares de Novak ante Federer, y también le permitió compensar la derrota que el suizo le infligió en semifinales del Roland Garros de este año.
No será la llamada final soñada que siempre se espera entre Federer y Nadal, pero sí la más lógica entre el uno y dos del mundo, un partido que se realizará conforme a lo planeado, en memoria del atentado a las Torres Gemelas de Nueva York.