Nueva York, 5 de octubre. El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, lamentó hoy el fracaso en el Consejo de Seguridad para acordar una resolución de condena contra Siria y afirmó que existe una obligación moral de evitar que se derrame más sangre en ese país, que a su vez consideró histórico el veto de Rusia y China al cuestionamiento del gobierno del presidente Bashar Assad.

El secretario general lamenta que el Consejo de Seguridad no haya sido capaz de llegar a un acuerdo y espera que supere sus divisiones y encuentre una forma colectiva de abordar la situación, dijo el organismo en un comunicado después de que el pasado martes China y Rusia impusieron su veto a una resolución sobre Siria apoyada por Estados Unidos y los países europeos.

En tanto, Siria, escenario desde marzo pasado de manifestaciones de protesta opositoras, calificó como jornada histórica la decisión de China y Rusia de oponer su veto ante medidas selectivas contra el régimen del presidente Bashar Assad.

La consejera del mandatario de Siria, Buthaina Shaaban, celebró que en el mundo existan otras potencias para alzarse contra la hegemonía y la intervención militar en los asuntos de los países y de los pueblos.

Mientras tanto, Turquía anunció este miércoles que impondrá sanciones unilaterales a Siria después de que China y Rusia vetaron el proyecto de resolución de Occidente en el Consejo de Seguridad de la ONU. Además, dijo que el ejército turco ensayará movilizaciones y comunicaciones entre las fuerzas armadas y sus autoridades como en situaciones de guerra en la frontera con Siria.

Estados Unidos mantendrá la presión contra el régimen de Bashar Assad y continuará trabajando con otros países, afirmó por su parte el Departamento de Estado. Alemania también lamentó que se haya frustrado la imposición de sanciones contra Siria.

El gobierno de Francia criticó a China y Rusia y rechazó sus alegatos de que la resolución hubiera abierto la puerta a una intervención militar. El canciller Alain Juppe afirmó que es un día triste para el pueblo sirio.

Poco antes de la votación en el Consejo de Seguridad, el presidente sirio advirtió que si la Organización del Tratado del Atlántico Norte interviene en su país, Siria y Hezbollah atacarían Israel con misiles, mientras que Irán atentaría contra objetivos estadunidenses y europeos, según la agencia iraní de noticias Fars.

Si una loca medida es tomada contra Damasco, no necesitaré más que seis horas para transferir cientos de cohetes y misiles a las alturas del Golán (norte de Israel) y dispararlos contra Tel Aviv, amenazó Assad.