Guadalajara, Jal., 20 de octubre. Fue una jornada de contrastes para la selección mexicana de squash. El equipo varonil logró avanzar a la final y asegurar la plata, tras reponerse de un marcador adverso y vencer 2-1 a Brasil.

La otra cara de la moneda fue el conjunto femenil encabezado por Samantha Terán, que se quedó al margen de la final y tuvo que conformarse con el bronce tras ser derrotado 2-1 por Canadá.

El cuadro mexicano de varones inició la serie con la derrota de Arturo Salazar ante Rafael Fernandes 6-11, 7-11 y 8-11.

Su hermano César recompuso el camino luego de imponerse a Vinicius Rodrigues 11-4, 11-8 y 11-6. De esta forma todo quedó en manos de Érik Gálvez, quien hizo lo propio y se impuso a Vinicius de Lima 11-6, 11-5 y 11-5.

México enfrentará por el metal dorado a los canadienses, que dejaron en el camino a Estados Unidos tras derrotarlo en los dos primeros juegos, motivo por el cual ya no se disputó el tercero.

Canadá es duro, pero nosotros estamos en casa, nos sentimos bien, acogidos, motivados y listos para mañana (hoy), que se venga de una vez, confió Érik Gálvez.

En tanto, el equipo femenil se despidió con el bronce y la sensación de que pudo llegar a la final.

La semifinal Canadá-México comenzó con el duelo de números uno entre Samantha Terán y Miranda Ranieri. La mexicana dio muestras una vez más de su talento y venció con claro 11-5, 11-4 y 11-2, pero no fue suficiente.

Imelda Salazar perdió ante Samantha Cornett, quien se impuso 11-6, 11-8 y 13-11, para que se igualara la serie, y Stephanie Edmison definió en favor de Canadá, al doblegar a Nayelly Hernández 11-8, 11-2 y 11-2.

“Realmente el problema no fue hoy, sino ayer en la serie que debimos haber ganado (contra Estados Unidos) y pasar en el primer lugar de nuestro grupo. Eso hizo que se complicara el día de hoy contra Canadá.

Las jugadoras están arriba en el tour mundial, entonces sí era complicado”, expresó Terán, quien se despidió de los Panamericanos con dos preseas de oro (dobles y singles) y el bronce por equipos.