Representantes del pueblo huichol y miembros del Frente en Defensa de Wirikuta se reunieron ayer con integrantes de la oficina en México del Alto Comisionado de la Organización de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, quienes manifestaron interés en realizar una visita a la comunidad y dar seguimiento y atención directa a la violación de derechos de los pueblos indígenas que suponen las concesiones mineras en la región.

Carlos Chávez, integrante del Frente en Defensa de Wirikuta, dijo en entrevista que entregaron a funcionarios de esa oficina (quienes los recibieron ante la ausencia del representante en México del Alto Comisionado, Javier Hernández Valencia) un documento que contiene análisis legales y técnicos, para su estudio.

Consideró que la reunión fue positiva, si bien aún no hay una fecha para la visita. Manifestaron su interés por analizar el caso, desde la perspectiva que les concierne, que es el tema de los derechos humanos y de los pueblos indígenas, apuntó.

Representantes de las comunidades huicholas acudieron a la capital del país a realizar movilizaciones en oposición a las concesiones mineras que el gobierno de Felipe Calderón ha otorgado a empresas canadienses en territorio sagrado del pueblo wixárika en Real de Catorce, San Luis Potosí.

En tanto, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales informó en un comunicado que hasta la fecha no tiene registro de algún trámite ingresado al Procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental relacionado con el proyecto minero en Wirikuta.

Afirmó que en caso de que ingrese alguna solicitud de autorización ambiental para la viabilidad de algún proyecto en dicha zona actuará en estricto apego a la ley, en salvaguarda de los derechos de las comunidades, con el compromiso de proteger el patrimonio natural de la región, y coincide de esta forma con la demanda que la etnia huichol plantea al gobierno federal para proteger sus lugares sagrados.

Toda empresa interesada en llevar a cabo un proyecto en la región debe hacer una solicitud para presentar la manifestación de impacto ambiental, documento que posteriormente es valorado por la Semarnat para decidir si otorga la autorización.

Dicha expresión de la dependencia federal fue calificada de alentadora por los activistas en defensa de Wirikuta, si bien señalaron que hay que esperar a que, llegado el momento en que la empresa haga los trámites correspondientes, la Semarnat actúe con congruencia y niegue la autorización ambiental.

Es positivo (que hayan) opinado eso, pero habría que ver de qué manera se aterriza. El Estado tiene que actuar; no puede ser omiso ante su obligación de tutelar los derechos de los pueblos indígenas, señaló Chávez.

A su vez, Iván Guzmán, también miembro del Frente en Defensa de Wirikuta, apuntó que lo que se espera es que la secretaría asuma un compromiso y haga ver que hay un daño ambiental por la minería.

Los huicholes esperan una resolución favorable, y no puede ser otra que la cancelación de las concesiones, para no lamentar después el desastre ecológico.

Los activistas recordaron que tienen detectados unos 30 proyectos de concesiones mineras, incluso más grandes que el de First Majestic, entre otros planes que atentan contra los centros ceremoniales sagrados del pueblo huichol.