Jueves 24 de noviembre de 2011, p. 28
Berlín. La canciller federal alemana, Angela Merkel, dijo ayer, durante el debate del presupuesto general para 2012 en el Bundestag, que la serie de crímenes xenófobos cometidos aparentemente por un grupo neonazi son un ataque contra la democracia. Además, pidió a todos los partidos democráticos del país que actúen unidos para acabar con el extremismo de derecha. Nos tomamos muy en serio el peligro que representa la ultraderecha y deberíamos ahorrarnos los reproches de ceguera en alguno de los ojos. Eso sólo provocará una fisura entre los demócratas
, advirtió.