Los campesinos temen que la mina reduzca sus fuentes de agua
Viernes 25 de noviembre de 2011, p. 33
Cajamarca, 24 de noviembre. Miles de pobladores de la norteña Cajamarca protestaron este jueves en el campamento de un millonario proyecto minero en Perú para exigir su cancelación, en desafío a la posición del gobierno y obligando a la empresa estadunidense Newmont a suspender labores en la zona.
Minas Conga, un plan de 4 mil 800 millones de dólares ubicado en el norte del país, es considerado clave en la industria minera peruana, uno de los principales motores de la economía local, que es blanco de una ola de protestas ambientalistas, sociales y laborales.
Al menos 2 mil manifestantes, muchos a caballo, llegaron a las instalaciones de Minas Conga, a 100 kilómetros de esta ciudad, para manifestar su rechazo al proyecto, mientras que cientos de policías y agentes de seguridad privados cuidaban los vehículos y la maquinaria de la firma.
Yanacocha, operadora del proyecto, dijo en un comunicado que los manifestantes incendiaron un almacén de tuberías
de plástico, sin causar víctimas.
Durante la protesta, los manifestantes bloquearon algunos tramos de carretera en Cajamarca con piedras y troncos. Los pobladores, que viven de la agricultura y la ganadería, reiniciaron así un paro indefinido en esa rica región minera para exigir la cancelación del proyecto ante el temor a que la mina reduzca sus fuentes de agua.
Gregorio Santos, presidente de región de Cajamarca y quien encabeza las manifestaciones, afirmó que el conflicto se ha convertido en una disputa por el agua
entre la población y Newmont.
El presidente Ollanta Humala, quien asumió sus funciones en julio pasado, dijo la semana pasada que el país sudamericano requiere del proyecto para su desarrollo económico y social, pero con cambios en su ejecución que garanticen el respeto al medio ambiente y eviten conflictos sociales.
Humala, un militar retirado, ha moderado su discurso radical de izquierda y ha prometido reducir la pobreza sin virar la política económica, que ha hecho que el país rico en recursos naturales registre un robusto crecimiento económico.
Según el proyecto, el mineral se encuentra debajo de cuatro lagunas y la compañía planea trasvasar sus aguas en tres reservorios. Los manifestantes temen que el plan afectará las fuentes y filtraciones naturales de agua en la zona.