Culiacán, Sin., 30 de noviembre. Ante el ataque cibernético que sufrió la página de Internet del semanario Ríodoce, que en su versión en papel circula en Sinaloa, y que lo mantiene fuera de las redes desde el 25 de noviembre, la Asociación de Periodistas y Comunicadores 7 de Junio afirmó que la entidad vive un deterioro creciente del ejercicio de la libertad de expresión y el periodismo.

Alfredo Beltrán, presidente de la organización, condenó el atentado que Ríodoce sufrió en su sitio web y manifestó que este caso, así como otros ataques a trabajadores de los medios informativos, son asuntos mayores.

“El ataque cibernético que sufrió el semanario Ríodoce, y que lo ha sacado de la circulación electrónica desde el 25 de noviembre no es un asunto menor. No puede verse como un hecho aislado, en un contexto como el de Sinaloa, caracterizado por el deterioro creciente del ejercicio libre del periodismo”, dijo Beltrán en un comunicado.

Ríodoce circula de manera ininterrumpida desde febrero de 2003, y se ha caracterizado por investigar temas diversos, entre ellos el narcotráfico y los operativos emprendidos por todos los niveles de gobierno contra el crimen organizado.

En septiembre de 2009 sus instalaciones, ubicadas en la colonia Almada, en Culiacán, Sinaloa, sufrieron un atentado con granadas, que sólo provocó daños materiales. Además, en octubre pasado, la publicación recibió el premio María Moors Cabot, otorgado por la Universidad de Columbia, en Nueva York.

Beltrán dijo que este tipo de ataques provoca daños en el ejercicio periodístico que todavía no se alcanzan a dimensionar, y que la calidad de la democracia se mide también por la calidad de la prensa.

Este nuevo hecho confirma la fragilidad con la cual se ejerce el periodismo en Sinaloa. Y constata que existen actores actuando en la penumbra, con el fin de silenciar los foros y espacios públicos, por donde fluye la crítica y la expresión de las ideas, manifestó.

La solidaridad de la sociedad, agregó, es lo que puede amurallar el ejercicio periodístico, y la civilización no se construye tumbando páginas de Internet de medios informativos. A las autoridades les corresponde generar las condiciones para el libre ejercicio del periodismo. De éstas, demandamos no más simulación y que la impunidad no sea el sello, que las siga distinguiendo, dijo.