Para resolver los problemas que enfrenta el Sistema Nacional de Investigadores (SNI) en sus procesos de evaluación, equidad de género, divulgación de la ciencia e inclusión de quienes se desarrollan en campos tecnológicos, entre otros temas, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) elaborará a partir de 2012 un diagnóstico que permita poner en blanco y negro los retos que enfrenta el principal programa de estímulos económicos para la comunidad científica nacional.

En entrevista con La Jornada, Enrique Villa Rivera, director general del Conacyt, reconoció que el SNI debe sufrir una modificación, tarea que iniciará José Luis Fernández Zayas, catedrático del Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quien ocupará, desde el primero de enero, la dirección del citado programa, en sustitución de Jesús Álvarez Calderón, investigador y profesor distinguido de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), quien retornará a sus actividades académicas.

Entre los temas que se deberán analizar, destaca la aplicación de un nuevo esquema de evaluación que incluyan la posibilidad de recurrir a peritajes y valoraciones de especialistas internacionales, a fin de que los científicos nacionales puedan ser evaluados con la élite del mundo, afirmó Villa Rivera, pues subrayó que a principios de 2012 sumarán 18 mil 542 miembros del sistema.

Por ello, enfatizó que si analizamos toda la estructura de organización para la evaluación, estamos prácticamente llegando a una saturación. Y una pregunta que nos hemos hecho es si no tendremos en algún momento que auxiliarnos con evaluadores internacionales.

Pese a reconocer que es un tema que espina un poco, cuestionó los mecanismos para evaluar a los niveles III del SNI.

Creado en 1984 por el gobierno federal, el sistema enfrenta las críticas de los propios investigadores, quienes en mayo de 2010, durante el Primer Congreso de Miembros del SNI, consideraron que el programa sufre una distorsión perversa de sus objetivos.