Michelle tiene 11 años y hace cuatro meses empezó a ver con dificultad y a caminar chueco, por lo que su abuela la llevó a la clínica del Seguro Social en Apizaco, Tlaxcala, de donde son originarias. Después de realizarle varios análisis clínicos, los médicos le encontraron un tumor en el cerebelo, por lo que fue intervenida qirúrgicamente y ahora está siendo atendida en el área de Pediatría del Centro Médico Nacional Siglo XXI del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), donde este este viernes más de una veintena de niños que se encuentran hospitalizados –junto con sus familiares– asistieron al festejo navideño organizado por voluntarios.

Michelle, niña de profundos ojos negros y ya sin el cabello que ha perdido a causa de las quimioterapias, esboza una gran sonrisa y dice convencida: El hospital es divertido. Durante mi tratamiento voy a la escuelita y a la ludoteca; los sábados y domingos, cuando no hay escuela, paso todo el día iluminando mis dibujos.

Roberto y Karina, ambos de 15 años, están hospitalizados desde hace más de dos semanas. Karina tiene insuficiencia renal crónica y Roberto contrajo una infección que se alojó en su cerebro. Los dos platican su experiencia y su día a día. Ella dice que pasa casi todo el tiempo viendo la televisión, que apenas ha conciliado el sueño. Antes, asegura, por la noche no dormía bien, tenía miedo de estar en el hospital; todavía lo siento, pero puedo dormir porque mi mamá se queda junto a mí. Roberto, por su parte, cuenta que está leyendo un libro sobre vampiros, que lo tiene bastante intrigado: le agrada, aunque tiene como 300 páginas; aun así me gusta.

Durante más de dos horas, los niños escucharon villancicos, comieron golosinas y rieron con un trío de payasos, quienes buscaban distraer un poco a los pequeños que permanecerán en el nosocomio durante las fiestas decembrinas. El festejo, que incluyó sencillos regalos para los menores, fue organizado por la Fundación Salud, Restauración y Prosperidad.

En la planta baja del hospital hay varias madres que acompañan a sus hijos. Muchas de ellas vienen de otros estados, en su mayoría Chiapas y Morelos. Cuentan que su estancia en el hospital es para apoyar el cuidado de sus hijos. Los acompañan a la escuela que la Secretaría de Educación Pública (SEP) mantiene en ese sitio para evitar que se retrasen en los estudios.

En el área de Pediatría del Centro Médico hay 200 niños ingresados para ser atendidos por cáncer, infecciones y otras enfermedades, 12 en terapia intensiva y otros 15 más en la UCI, según funcionarios del IMSS consultados.