La Comisión Federal de Competencia (CFC) consideró que el uso de la palabra agave en la comercialización de bebidas alcohólicas producidas a partir de las agaváceas puede generar distorsiones en el mercado y beneficiar a ciertos productores. En una opinión sobre la norma oficial mexicana que elabora la Comisión Federal de Mejora Regulatoria (Cofemer), la CFC aseguró que el anteproyecto generará beneficios, pues la reglamentación busca informar a los consumidores sobre los contenidos en bebidas alcohólicas de este tipo. Sin embargo, sostuvo que el anteproyecto de norma oficial contiene disposiciones que regularían de forma excesiva la forma de producir y comercializar bebidas alcohólicas elaboradas con agave. La Cofemer inició consultas sobre una propuesta para que la palabra agave sea marca regulada por el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial para la utilización exclusiva de personas físicas o morales que se dediquen directamente a la producción de tequila, mezcal, bacanora y sotol, éstas denominación de origen. Eduardo Pérez Motta, presidente de la CFC,consideró que el anteproyecto tiene disposiciones que generarían ventajas exclusivas en favor de ciertos productores e introducirían distorsiones al mercado, las cuales podrían resultar contrarias al proceso de competencia y libre concurrencia.

29 de agosto de 2011: Pemex y Sacyr anuncian un acuerdo de sindicación de acciones, por el que se comprometen a actuar de forma conjunta y a sumar hasta 29.9 por ciento de acciones de Repsol. Su intención es controlar a la compañía nombrando un consejero delegado afín. En la operación se involucró de forma directa el gobierno de Felipe Calderón, a través de su embajador, Jorge Zermeño, y la administración del presidente saliente español, José Luis Rodríguez Zapatero.