La celebración de la Nochebuena dejó montañas de basura en diferentes puntos de la ciudad y mala calidad del aire, aunque no alcanzó niveles para declarar precontingencia.

La ausencia de camiones recolectores, aunada a la negativa de llevarse los residuos si no están separados en orgánicos e inorgánicos, y unidades en espera de entregar su carga en los centros de transferencia, provocaron que fuera depositada en lugares como el Hemiciclo a Juárez y se realizara por segunda ocasión una protesta en Eje 1 Norte, en la zona de Tepito, donde bolsas y cajas con desechos obstruyeron la vialidad durante alrededor de dos horas, con los consecuentes problemas de tránsito.

Cerca de las 10 horas, los vecinos salieron a colocar decenas de bolsas de basura, cajas de regalos y todo tipo de desechos a la altura de las calles Azteca y Rayón, lo que impidió el paso vehicular, en protesta por la falta de camiones recolectores, cuyo número descendió en los últimos días ante el cierre del relleno sanitario Bordo Poniente.

Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal realizaron cortes viales a la altura de Paseo de la Reforma y Eje 1 Norte para que los automovilistas no quedaran varados, ya que también se vieron afectadas avenidas aledañas, debido al último ciclotón del año.

La policía informó que no se requirió la presencia de elementos, pues el cierre no fue hecho propiamente por los vecinos, por lo que sólo se aplicaron medidas viales.

De acuerdo con las autoridades, el primer camión recolector arribó aproximadamente a las 13 horas y el personal de limpieza informó que enviarían cinco unidades más para trasladar los residuos sólidos que bloqueban la vialidad.

También el Hemiciclo a Juárez amaneció con un cerro de basura producto de la visita de la gente a la Alameda Central para tomarse la foto con Santaclós y los Reyes Magos, subirse a los juegos mecánicos o comprar alimentos y juguetes en alguno de los puestos instalados en estas romerías. Ni los carritos ni el camión han pasado y la basura se fue acumulando aquí, lo cual nunca había sucedido. Esperamos que vengan a limpiar, comentaron algunos comerciantes.

Dicha escena navideña se observó en otros puntos de la ciudad, donde la colocación de nichos dedicados a algún santo o a alguna virgen, y advertencias pintadas en paredes de que si son sorprendidos arrojando basura serán consignados ante las autoridades correspondientes no fueron suficientes para impedir que la gente sacara sus bolsas de plástico y cajas de cartón repletas de residuos de alimentos, envases de refrescos, vinos y envolturas de regalos que fueron entregados la víspera.

Trabajadores de limpia de la delegación Cuauhtémoc informaron que alrededor de 50 por ciento de los camiones recolectores de basura llevan más de 48 horas sin poder descargar los residuos, por lo que han tenido que encerrar las unidades con los desechos, pues el 24 trabajaron sólo medio día.

Dijeron que no hay cajas en los centros de transferencia para depositarla; además, el traslado de los residuos ha demorado hasta cinco horas por tráiler.

El gobierno debería rentar más cajas, por lo menos para que podamos tirar la basura y hacer los recorridos; de lo contrario, en los próximos días estos montones de basura en los comercios se verán en las calles, advirtieron.

Al referirse al caso de Tepito, comentaron que pese a que se les pidió que la separaran, no lo han hecho. Dijeron que 80 por ciento de lo que se recoge proviene del comercio y, para evitar problemas, sólo se acordó que la entregaran barrida.

Los festejos también provocaron un incremento de partículas suspendidas denominadas PM10 en la zona noreste, donde la calidad del aire fue mala, ubicándose en 138 puntos, informó el Sistema de Monitoreo Ambiental.

Las autoridades capitalinas se mantienen atentas, pues de subir a 150 puntos podrían decretar precontingencia ambiental.