Boston, 30 de diciembre. El día de año nuevo en la NFL es una jornada de pura fiebre por el futbol americano. Los 32 equipos entran en acción en la última fecha de la temporada regular, en la que aún quedan por definir siete puestos para los playoffs rumbo al Súper Bowl 46 del 5 de febrero, que se llevará a cabo en Indianápolis.

El partido estelar de la noche del domingo será entre Gigantes de Nueva York y Vaqueros de Dallas por el último cupo de la Conferencia Nacional (NFC): el que gane estará dentro.

Como si lo que hay en juego no fuera suficiente, el runningback Brandon Jacobs, de Gigantes, agregó pimienta: “Los fans de los Vaqueros son asquerosos, en cuanto abren el pico me ponen de nervios”.

En Dallas, las miradas se centran en el mariscal de campo Tony Romo, del que se dice que brilla en noviembre y desaparece en diciembre.

Aunque el duelo se disputará el primero de enero, la presión sobre el jugador de 31 años será enorme. La cadena de televisión ESPN ha considerado el choque como el más importante en la vida de Romo.

Gigantes, campeón en 2008, vencieron 37-34 hace tres semanas a los texanos, que a 3:14 minutos del final ganaban en casa por un cómodo 34-22. Fue el primer triunfo de Nueva York luego de cuatro derrotas.

Todavía no está claro quién resultará vencedor de un duelo cuya rivalidad nació con un 31-31 en el primer choque, el 4 de diciembre de 1960.

A ambos les falta regularidad: los Vaqueros han perdido sus recientes seis partidos disputados un domingo por la noche y Gigantes sólo pudo ganar tres de los siete disputados en casa en lo que va de temporada.

En la Conferencia Americana, Denver y Cincinnati son favoritos ante Kansas City y Baltimore, de manera respectiva. Una victoria metería a ambos equipos en los playoffs.

Oakland, Jets y Tennessee deberán esperar un tropiezo de Broncos y Bengalíes, mientras Nueva Inglaterra llega relajado a la última jornada, pues ya está en cuartos de final. De vencer a Búfalo, el equipo de Boston tendría la ventaja de jugar en casa tanto los cuartos como en una hipotética semifinal.