Con recursos públicos se difunde 75 por ciento de las campañas que contienen elementos sexistas y 84 por ciento con violencia de género, determinó el análisis de 50 campañas en 16 entidades del gobierno federal realizado por el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), la Secretaría de Gobernación y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.

El monitoreo evaluó 339 anuncios (la mitad publicados en medios impresos, 19 por ciento difundidos en radio y 31 por ciento en televisión) y determinó que en sólo uno de cada cuatro no hubo sexismo.

Además, 76 por ciento de 166 narraciones en radio y televisión fueron sólo de varones, y en nueve de 16 dependencias, cien por ciento de las narraciones fue hecha por hombres.

Con esto se violan los derechos humanos de las personas, los tratados y acuerdos internacionales suscritos por nuestro país y las leyes nacionales en materia de derechos humanos y equidad de género, señala la consideración de la investigadora universitaria Olga Bustos Romero, presentada durante el Simposio Internacional de Publicidad no Sexista, organizado por el Inmujeres a finales del año pasado.

El monitoreo analiza campañas de dependencias como las secretarías de Salud, de Hacienda y Crédito Público y Seguridad Pública, así como de la Procuraduría General de la República, comprendidas entre 2009 y 2010.

La evaluación muestra que las campañas promueven imágenes y lenguaje sexista al presentar, por ejemplo, hombres en primer plano realizando actividades estereotipadas como masculinas (fungiendo como proveedores o solicitantes de crédito) y a mujeres en papeles tradicionales, como madres, esposas, amas de casa o enfermeras.

En otros anuncios se promueve la violencia sexual al cosificar a las mujeres presentándolas en ropa interior y utilizando el doble sentido en el lenguaje.

A partir de los resultados, y como parte de la investigación, se elaboraron manuales de capacitación para personas que están en los medios o en las áreas de comunicación social, como el Manual de sensibilización para incorporar la perspectiva de género en las campañas del gobierno federal.