Un adolescente de 15 años de edad fue abatido este miércoles por la Policía Federal (PF), cuando intentó huir de una revisión en un puesto de control móvil en la colonia popular Las Polvaredas, al sureste de Fresnillo, Zacatecas.

De acuerdo con fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública de Zacatecas, el menor circulaba a bordo de una camioneta, pasó frente a los policías federales y en lugar de detenerse emprendió la huida. Los agentes lo persiguieron, lo acorralaron y, de acuerdo con vecinos de Las Polvaredas, ahí lo acribillaron, a bordo del vehículo que tripulaba.

El incidente ocurrió muy cerca de una escuela primaria, y según fuentes policiacas, un niño resultó herido por un rozón en la cabeza, además de que dos mujeres adultas también sufrieron heridas leves producidas por esquirlas.

Asimismo, policías federales persiguieron sobre la carretera federal Puebla-Atlixco al presunto ladrón de automotores Daniel Landín Gutiérrez, quien conducía una camioneta tipo Cherokee con placas del Distrito Federal. La persecución empezó en la comunidad Chipilo, municipio de Atlixco, y concluyó luego de recorrer unos 12 kilómetros en la colonia Las Ánimas, una de las zonas comerciales más transitadas de la capital de Puebla, donde Landín Gutiérrez fue herido a balazos y murió cuando lo llevaban a un hospital.

En tanto, la Procuraduría del estado de México presentó ayer a Octavio Domínguez Ortiz, El Mojito, presunto líder de una célula de la organización criminal La Familia, a quien se atribuyó ser uno de los responsables de los asesinatos de cinco policías municipales de Ixtapaluca perpetradas el lunes pasado.

De su lado, Juan Manuel Rodríguez Nieto, presidente de la Comisión de Seguridad Pública en el Congreso de Tamaulipas, consideró que es una miseria la donación de 4 millones de dólares en equipo y capacitación que Estados Unidos hizo a la policía de esa entidad, y aseguró que no se compara con la cantidad de armamento que ingresa de ese país a México, y la violencia que genera.

En este contexto, ayer se documentaron 34 muertes en hechos que tendrían vínculos con la delincuencia organizada, siete de ellas en Chihuahua; cuatro en un enfrentamiento entre policías federales y supuestos criminales en el municipio de Guadalupe, Zacatecas, entidad donde asimismo perecieron dos presuntos delincuentes que combatieron entre sí, cuatro en Michoacán, cuatro en Sinaloa, tres en Baja California, dos en Veracruz, dos en Sonora, dos en el estado de México, dos en Nuevo León y dos en Durango.