Tijuana, 12 de febrero. Xolos de Tijuana y Cementeros del Cruz Azul consumieron los 90 minutos de un juego de mala calidad con apenas chispazos que nunca llegaron a la explosión del gol, por el que algunos aficionados pagaron hasta mil pesos para conseguir un boleto en la reventa. Al final todo culminó en un decepcionante 0-0 en el estadio Caliente.

Luego de un inicio vertiginoso de La Máquina, que controló el duelo en los primeros minutos y tuvo una importante oportunidad en los botines de Edixon Perea, cuyo envío terminó en las tribunas, Tijuana se adueñó del resto del encuentro, principalmente con tiros erráticos de media distancia.

Quizá los que más insistieron sobre el arco de Jesús Corona fueron Duvier Riascos, Egidio Arévalo, Joe Corona y Édgar Castillo, quienes tras juntarse entre ellos o bien con José Sand trataron de crear peligro y abrir el marcador.

A la postre, lo único memorable de la cita resultó ser el abrazo emotivo entre Enrique Meza, timonel de los celestes, y Antonio Mohamed, el alumno excéntrico y locuaz del Ojitos, líder del equipo Toros Neza, que pintó una época del balompié mexicano.

Ante el desgaste del viaje a Sudamérica, Meza decidió dar descanso a algunos de sus jugadores, lo cual repercutió en el accionar del equipo, que tuvo un comienzo aceptable, pero conforme transcurrieron los minutos fue sometido.

El inicio se inclinó por completo para los capitalinos. Un control efímero, dado que Xolos se metió al partido y empezó a tener más tiempo el balón, pero con poca idea futbolística para pisar con peligro el área cementera.

Ante esta incapacidad para penetrar el cuadro bajo de los visitantes, los pupilos del argentino Mohamed buscaron vencer a José de Jesús Corona con disparos de media distancia, pero sin éxito.

En tanto, Cruz Azul estuvo prácticamente inédito de mediocampo al frente, pues el brasileño Maranhao no aportó nada por la banda izquierda, mientras el colombiano Edixon Perea y Omar Bravo tuvieron escasa presencia en el área, por lo cual ambos equipos se fueron al descanso sin goles.

La tónica del encuentro fue la misma para la parte complementaria, con muy pocas emociones en las porterías, hasta que Cirilo Saucedo realizó un mal despeje y en la salida le regaló el balón a Omar Bravo, quien sacó un disparo a la derecha del portero cuando tenía todo para liquidarlo, al minuto 56.

El Turco Mohamed hizo cambios en busca de dar variantes a su ofensiva, con los ingresos del argentino Leandro Fernández y de Raúl Enríquez, misma situación de los celestes, con la entrada de los argentinos Christian Giménez y Emanuel Villa.

Dichas modificaciones, sin embargo, no tuvieron efecto alguno en ninguno de los dos lados y sólo en tiempo de reposición los de casa estuvieron cerca de salir con la victoria.

El recién ingresado Richard Ruiz desbordó por la banda derecha hasta la línea de fondo, donde mandó una diagonal retrasada que llegó al uruguayo Egidio Arévalo, quien de frente y con todo para definir voló su remate de forma increíble, para firmar un insípido empate sin goles.

El arbitraje estuvo a cargo de Erim Ramírez, quien tuvo una labor regular. Amonestó al argentino Javier Gandolfi (4) y al uruguayo Egidio Arévalo (64), por los de casa. Héctor Gutiérrez (53) vio cartón preventivo por los visitantes.

Ojitos Meza afirmó que dejó en la banca a Chaco Giménez y a Villa debido al viaje que hicieron a media semana por la Copa Libertadores, y añadió que el club debe jugar bien sin importar qué elementos participen. Busco que mi equipo juegue bien esté quien esté. Ése es mi trabajo. (Los cambios fueron) por las necesidades, indicó.

Fuimos jugar a Paraguay, en un viaje largo. No es queja, pero las condiciones se fueron dando como para que el equipo esté fresco. El resultado fue justo, porque ningún equipo fue capaz de meter un gol. Me gustó por todo, por las condiciones, por el rival, porque éste juega bien y es muy rápido.

Acerca de la falla de Omar Bravo en un mano a mano ante Cirilo Saucedo, Meza lo justificó: Para fallarla hay que estar ahí y yo a veces me equivoco para hacer un cambio, para tomar una decisión. Sí, la falló y no ha hecho goles, pero pronto los va a anotar. Sus actuaciones me dejan tranquilo.