La infertilidad afecta en México a cerca de 3 millones de parejas y cada año se suman alrededor de 200 mil. Las alternativas eficaces para que estas personas logren ser padres y madres de familia son los procedimientos de reproducción asistida, cuya evolución permite ofrecer a 90 por ciento de quienes la realizan la certeza de que lograrán un embarazo exitoso, aseguró José Islas Varela, director del Instituto Especializado en Infertilidad y Medicina Reproductiva (Insemer).

Señaló que las técnicas disponibles tienen como guía las mejores prácticas internacionales, las cuales han demostrado que regulaciones rígidas, como los proyectos de ley detenidos en el Congreso, que pretenden imponer fórmulas matemáticas a los tratamientos, son inviables y perjudican sobre todo a las mujeres.

En conferencia, el especialista comentó que se realizan anualmente unos 30 mil tratamientos de reproducción asistida, con lo que México se ubica en el tercer sitio en América Latina, después de Brasil (60 mil) y Argentina (45 mil).

Las mejores perspectivas de éxito las tienen mujeres menores de 37 años de edad, aunque en México la experiencia indica que transcurren de tres a seis años antes de llegar con el especialista que les puede ofrecer alternativas reales. En países desarrollados, ese tiempo va de dos meses a dos años.

La falta de información y algunos mitos están entre las principales causas de ese retraso. Aseguró, por ejemplo, que el uso prolongado de métodos anticonceptivos nada tiene que ver con la infertilidad.

En cambio, influyen el sobrepeso y la obesidad, que provocan alteraciones en la ovulación, así como enfermedades, como endometriosis, y la presencia de miomas en el útero. También afectan alteraciones como el ovario poliquístico y en la reserva de óvulos.

Del lado masculino puede haber alteraciones en el semen en cuanto a volumen, cantidad, movilidad y morfología. Para los varones que se practicaron vasectomía existen métodos de obtención de espermatozoides, y otras causas de infertilidad están relacionadas con enfermedad de la próstata y disfunción eréctil.

Islas Varela aseguró que las pacientes de Insemer tienen una probabilidad de 50 por ciento de lograr un embarazo en el primer intento, cuando en la fertilización se utilizan óvulos de la misma mujer, y el porcentaje sube a 75 cuando hay donación de éstos. Lo anterior se explica porque en mujeres mayores de 35 años, que representan a la mayoría de las personas que incursionan en tratamientos de reproducción asistida, la calidad de los óvulos disminuye, y con ello la posibilidad de que se conviertan en un embrión viable para lograr el embarazo.

El indicador de éxito se eleva a 90 por ciento de manera global con parejas que requieren repetir los procedimientos, apuntó.