El premier británico le desea suerte
al presidente francés en la búsqueda de su relección
Sábado 18 de febrero de 2012, p. 25
París, 17 de febrero. El presidente francés, Nicolas Sarkozy, y el primer ministro británico, David Cameron, firmaron este viernes una serie de acuerdos bilaterales en las esferas militar y de energía nuclear, entre los que se anunció un proyecto conjunto de un avión teledirigido en el contexto de una asociación estratégica de largo plazo
.
Al término de la cumbre franco-británica, Sarkozy declaró que las dos naciones llevan la parte esencial del esfuerzo de la política de defensa en Europa
, pues el presupuesto militar de ambos países representa la mitad del de toda la Unión Europea (UE).
La cooperación en la defensa europea es sustancial y hay una nueva capacidad operativa conjunta que cubre áreas más sensibles, incluida la nuclear, dijo a su vez Cameron, a quien acompaña su canciller William Hague y el titular de Defensa, Philip Hammond.
En una declaración conjunta emitida aquí, los dos países dieron cuenta de una asociación estratégica a largo plazo
sobre los aviones de reconocimiento teledirigidos, la producción de misiles, las comunicaciones militares satelitales y los ensayos nucleares.
Como antecedente, Londres y París firmaron en noviembre de 2010 el ambicioso tratado de defensa y seguridad de Lancaster House, en el cual se sientan las bases para la investigación y fabricación conjunta de un misil antinaval.
Ahora se suscribieron además contratos sobre energía atómica por unos 600 millones de euros y la construcción de varios reactores nucleares. No obstante, desde Londres se informó que se trata tan sólo de un comienzo y que el volumen de encargos podría llegar a unos 72 mil millones de euros.
Reino Unido y Francia seguirán ampliando su red de centrales nucleares, a diferencia de Alemania, que decidió ponerles fin paulatinamente tras el desastre japonés de Fukushima de marzo de 2011.
Esta cumbre franco-británica tiene lugar después de las desavenencias ocurridas durante la reunión de la UE en diciembre de 2011, en lo referente a un proyecto para solucionar la crisis de la deuda en el bloque comunitario.
En esa oportunidad, el jefe de gobierno de Gran Bretaña se negó a adoptar un plan impulsado por Sarkozy y la canciller federal de Alemania, Angela Merkel, encaminado a aplicar medidas de severo control presupuestario y fiscal.
El primer ministro británico se opuso asimismo al impuesto a las transacciones financieras por el que aboga el jefe de Estado conservador de Francia.
Este día, al limar asperezas, Cameron declaró que a pesar de los desacuerdos, ambos países necesitan entenderse. Por eso, al igual que Merkel lo hizo hace poco, el primer ministro británico aprovechó para desearle suerte
a Sarkozy en la búsqueda de su relección.
Tras dos días de la oficialización de la candidatura de Sarkozy para un segundo mandato, el premier británico dijo que tenía la oportunidad de desear suerte a mi amigo en la batalla que va a librar
y que admira su valentía y el liderazgo
, pero que corresponde al pueblo francés decidir
.
Al preguntarle la prensa si contaba dar un apoyo activo a Sarkozy, como la canciller alemana, ambos como él dirigentes conservadores, Cameron respondió: No estoy seguro que si interviniera en la campaña los resultados fueran los deseados para mi amigo
.
Por su parte, Sarkozy declaró que recibía con placer
el apoyo del primer ministro británico.