A diferencia de los comicios de 2006, cuando se ordenó expresamente restringir al máximo legal la apertura de paquetes electorales para los cómputos de la elección en curso, el Instituto Federal Electoral (IFE) ha girado instrucciones a sus consejos locales y distritales para que exista la disposición absoluta de la estructura ejecutiva del instituto para efectuar los recuentos parciales o totales en todos los casos sin excepción y conforme a la ley.

En una circular del secretario ejecutivo, Edmundo Jacobo Molina, dirigido a consejos locales y distritales, se señala que para ofrecer mayor certeza de que los cómputos totales o parciales se realicen con la mayor transparencia, contarán con todo el apoyo material, logístico y organizativo de la rama ejecutiva. Por otro lado, en rueda de prensa, el secretario ejecutivo aseguró que el IFE está en disponibilidad de que se abra todo lo que tenga que abrirse para dar certeza a los actores políticos.

En la conferencia, convocada para explicar la mecánica de los cómputos, el director ejecutivo de organización electoral, Miguel Ángel Solís, informó que para anticipar escenarios se consultó a los 300 consejos distritales, de los cuales 142 dijeron tener capacidad en sus instalaciones para realizar cómputos totales o distritales. En los 158 restantes, que no tienen esos espacios, se elegirán sedes alternas o se habilitarán las calles para realizar los recuentos.

Jacobo Molina explicó que será en las reuniones de planeación del martes 3 de julio cuando se determinen con precisión los alcances de la apertura de paquetes en los cómputos de las tres elecciones –Presidencia, diputados y senadores– y se definirán aquellos distritos que requerirán espacios de recuento excepcionales.

Al respecto, el consejero presidente del IFE, Leonardo Valdés, descartó riesgos de seguridad en el recuento, porque se realizarán bajo custodia del Ejército o la Marina. Los consejos distritales, que conocen el entorno de las sedes, definirán la forma de recuento y ellos tienen la instrucción de no poner en riesgo la seguridad de una persona o las boletas. Solís complementó mencionando que es evidente que si el Ejército considera que en un distrito se sale a la calle puede reforzar con los elementos que considere necesarios.

Solís señaló que en lo que corresponde a la vigilancia política de los recuentos, habrá 202 representantes de partido –de los siete en disputa– que supervisarán la legalidad del recuento. Los partidos políticos convalidarán las decisiones de fijar sedes alternas para realizar los cómputos cuando no se cuente con las condiciones.

“Evidentemente –subrayó Valdés– nosotros garantizamos certeza en los cómputos distritales que se realicen en las oficinas de sedes del IFE o en sede alterna”, y añadió que en todos los casos, cuando se determinen otros espacios para el recuento, la decisión deberá contar con el aval de los partidos políticos. Informó que en 2009, en 19 distritos hubo recuento total y en otros hubo parciales.

Será la primera vez que en una elección presidencial operen las nuevas causales de recuento de votos incorporadas a la legislación para dar mayor certeza tras las polémicas elecciones de 2006 y que permiten ahora el recuento parcial o total de paquetes en un distrito cuando se tengan estos supuestos: errores o inconsistencias en las actas, que los votos nulos sean mayores a la diferencia entre el primero y el segundo lugares o que todos los votos sean para un solo partido. Asimismo, habrá recuento total en un distrito cuando la diferencia entre el primero y segundo lugares sea menos de uno por ciento y el segundo lugar lo solicite expresamente.