En 1899 fue desplazado de la Ciudad de los Muertos para rendir homenaje a Porfirio Díaz
Se realizan estudios para determinar con certeza el sitio exacto de donde fue llevado, informa el delegado del INAH
La piedra de seis toneladas pertenece a la cultura mixteca
Martes 10 de julio de 2012, p. 7
Villa de Mitla, Oax., 9 de julio. Después de 113 años de haber sido sacado de la zona arqueológica de Mitla, este medio día fue regresado a su lugar de origen un monolito de casi cuatro metros de altura, seis toneladas de peso, un metro de diámetro y casi 700 años de antigüedad.
De acuerdo con Eloy Pérez Sibaja, delegado en Oaxaca del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), la pieza fue extraída de la Ciudad de los Muertos en 1899, a solicitud del entonces gobernador Martín González, para rendir un homenaje al presidente Porfirio Díaz Mori.
El monolito permaneció hasta 1932-1933 en la rotonda de la hacienda de Aguilera, en el Paseo Porfirio Díaz –hoy calzada Porfirio Díaz–, trasladándose al Museo de los Pintores Oaxaqueños (Mupo), el cual durante aquella época fue la delegación estatal del INAH, donde se mantuvo hasta la mañana de este lunes.
Gestiones de tres años
Pérez Sibaja manifestó que desde hace tres años se iniciaron las gestiones para el retorno de esa pieza a su lugar de origen, y aun cuando fueron un tanto lentas, el monolito pudo ser regresado a Mitla, adonde pertenece.
Sin embargo, el funcionario puntualizó que todavía se realizan los estudios pertinentes para conocer cuál es la ubicación exacta de donde fue extraído.
La columna, dijo, pertenece a la cultura mixteca y forma parte de los elementos arquitéctonicos y del sistema de construcción que se utilizó en la época posclásica, 1100-1400 dC.
Los trabajos formales comenzaron a las tres horas de este lunes para poder sacar el monolito del Mupo y montarlo en una grúa, labor que concluyó a las siete horas y, tras un descanso, en punto de las 11 horas se inició el viaje con custodia de elementos de las policías Estatal y Federal.
En la entrada principal de Villa de Mitla ya eran esperados por las autoridades municipales, quienes recibieron la pieza con música de banda, pues aseguraron que el retorno de la columna era una fiesta para todos; en la zona arqueológica gran número de habitantes esperaban el arribo para atestiguar lo que calificaron de un momento histórico.
Una señora, oriunda del lugar, derramó un poco de mezcal en el hoyo excavado dentro de la zona protegida por el INAH, para bendecir la tierra y que ésta mantenga al monolito por muchos años más.
El delegado del INAH en Oaxaca y trabajadores del instituto arrojaron varias monedas en dicho espacio, lo cual, explicó Eloy Pérez Sibaja, servirá como una máquina del tiempo para que si años después deciden volver a mover la pieza de su lugar originario encuentren vestigios del año en el que el monolito se colocó de nuevo en Mitla.