La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) consideró que ante la extensión del fenómeno bullying en las escuelas del país, donde se estima que cuatro de cada 10 alumnos entre los seis y 12 años de edad han sufrido algún tipo de agresión, es indispensable que se adopten medidas que garanticen que niñas, niños y adolescentes vivan en un ambiente libre de violencia, tanto en el hogar como en la escuela.

El organismo precisó que el bullying –el acoso escolar y violencia de manera deliberada y continua, de uno o varios estudiantes en contra de otro, con el propósito de lastimarlo, humillarlo, dominarlo o asustarlo– ha crecido en las escuelas, por lo que es urgente abatirlo.

Abundó que el maltrato físico o sicológico puede llegar a provocar depresión, baja autoestima, ansiedad, deserción escolar, bajo desempeño y en casos extremos hasta el suicidio.

Refirió que las agresiones contra alumnos por sus mismos compañeros pueden consistir en golpes, empujones, burlas, insultos, despojo de bienes y recientemente el envío de mensajes ofensivos por correo electrónico o mediante el uso de teléfonos celulares y redes sociales.

Destacó la CNDH, que de acuerdo con la opinión de alumnos de primaria y secundaria, expresada en una encuesta nacional, las agresiones físicas más recurrentes son puntapiés, puñetazos, empujones y jalones de pelo, y esto sucede tanto en los salones como en el patio de recreo.

La comisión reveló que datos oficiales indican que en las escuelas 44.6 por ciento de hombres y 26.2 por ciento de mujeres han insultado a alguien; en tanto que 6.6 por ciento de niñas y 14.9 por ciento de varones han golpeado en alguna ocasión a sus compañeros.

Por otro lado, un informe de la Comisión Económica para América Latina (Cepal), de 2011, señala que 11 por ciento de los estudiantes mexicanos de primaria han robado o amenazado a algún compañero, y que en secundaria ese porcentaje llega a 7 por ciento.

El informe de Cepal, de agosto de 2011, apunta que los estudiantes de sexto grado de primaria declararon que en sus escuelas fueron víctimas de robo (40.24 por ciento), insultos o amenazas (25.35 por ciento); golpes (16.72 por ciento); en tanto 44.7 por ciento dijo haber sufrido algún episodio de violencia.

Mientras, el informe El aprendizaje en tercero de secundaria, del Instituto Nacional de Evaluación Educativa (INEE), precisa que 315 mil adolescentes que cursan el tercer grado consideran que el nivel de violencia es sus escuelas es alto, debido a la frecuencia de casos de adicción a sustancias tóxicas, portación de armas de fuego y peleas a golpes dentro de los planteles.

Además, otros 445 mil estudiantes opinaron que el entorno en sus centros educativos es agresivo por robos, riñas, ataques a alumnos y consumo de drogas.

Ante esto, la CNDH subrayó que debido a esta realidad ha desarrollado estrategias dirigidas a estudiantes, maestros y padres de familia, para promover la no violencia, el respeto y la tolerancia.

Resaltó que mediante la campaña nacional para abatir y eliminar este fenómeno, llamada: Ponte la camiseta contra la violencia escolar, se organizan foros y cursos de capacitación en primarias y secundarias que favorecen el conocimiento de los derechos de niñas, niños y adolescentes.