Londres, 11 de agosto. Mano Menezes, estratega de Brasil, sostuvo: Obviamente estamos tristes porque hicimos un excelente trabajo para llegar hasta esta final, lo que nos había dado gran confianza de poder conquistar finalmente la medalla de oro. Resaltó que el gol tempranero de Peralta causó un fuerte impacto estratégico y los forzó a cambiar las ideas.

Con el rostro acongojado, explicó: Fuimos acometidos por un gol a los 40 segundos y eso nos modificó estratégicamente. Negó que la falla defensiva de Rafael haya sido clave, pues tuvimos 89 minutos más para cambiar eso. Perdimos todos, no por una falla individual.

Concluyó: Reconocemos la superioridad del adversario y felicitamos a México por el oro, que me gustaría fuese nuestro... El saldo es positivo porque se llegó a la final. Hay que hacer una lectura correcta más tarde con la mente fría. De momento, adjudicó a la cultura brasileña considerar la presea de plata como un fracaso, lo que desató rechiflas de los brasileños que presenciaron el partido.

La vida no se acaba aquí

El publicitado Neymar reconoció que México fue mejor y mereció el triunfo. La medalla de plata es muy valiosa también, pero nuestro objetivo era ganar el oro y estamos decepcionados. Thiago Silva anotó: Es triste, pero la vida no se acaba aquí... es duro para nosotros que nunca hemos ganado la medalla de oro olímpica.

El delantero Hulk manifestó: De nada sirve pensar qué hubiese pasado si hubiera yo entrado antes. Mi voluntad era comenzar jugando.

El ex astro Pelé, quien viajó a Londres con la idea de festejar con el equipo de su país, sobre todo después que Marcelo y Alex Sandro declararon que querían ganar para homenajear al ex crack del Santos, tuiteó con amargura: El futbol es una caja de sorpresas y a veces el mejor equipo no gana.