En la celebración del 75 aniversario de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), el presidente Felipe Calderón presumió la gran capacidad operativa del organismo, que de hecho, dijo, fue uno de los elementos más importantes para tomar la decisión de intervenir la extinta Compañía de Luz y Fuerza del Centro y operar la distribución de la energía eléctrica en la zona centro del país.

Calderón señaló que el gobierno federal no tenía otra alternativa, pues no sólo representaba un creciente subsidio de 50 mil millones de pesos para 2010, sino que el sindicato –Mexicano de Electricistas (SME)– no había cumplido con un convenio de productividad firmado desde 2008.

Reveló que en una reunión con varios funcionarios, celebrada en Los Pinos, definió diez condiciones para decidir la intervención de Compañía de Luz, entre las cuales se tomó en cuenta la capacidad de la CFE para operar las instalaciones sin suspender el servicio de energía eléctrica en el centro del país.

Esto no hubiera sido posible sin el valor, la capacidad técnica y entrega y, sobre todo, el enorme amor de México de las y los trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad, mencionó el mandatario ante varios de los ex directores del organismo, aunque reconoció de manera especial el papel de Alfredo Elías Ayub, quien era director en esos momentos.

En el encuentro realizado en el Museo Tecnológico de la CFE, en Chapultepec, Calderón recordó que la decisión de liquidar la Compañía de Luz se había tomado ya desde 2008 –un año antes de que se concretara–, cuando se publicó en el Diario Oficial de la Federación el primer decreto de intervención. Pero a unos minutos de que venciera el plazo se llegó a un acuerdo con el sindicato, el cual fue incumplido con el argumento de que iba en contra del contrato colectivo de trabajo.

No lo iban a cumplir y todos tan campantes. Se les hizo saber a los señores que no, aquí no es todos tan campantes, ni aquí va a seguir todo igual. O se cumple el convenio o tendremos que hacerlo cumplir, dijo el presidente, quien sostuvo que la situación se deterioraba cada vez más, con un subsidio de más de 50 mil millones de pesos y baja productividad. Era evidente que no quedaba otra alternativa que intervenirla.

Así, dijo, en una sola noche la CFE pasó de tener 28 millones a 35 millones de usuarios. Es decir, un reto descomunal de un incremento de casi 25 por ciento de su servicio, y se hizo prácticamente con la octava o sexta parte del personal que solía operar en la zona centro del país.

Calderón destacó el papel fundamental que ha jugado el organismo en el desarrollo y progreso del país, y dio a conocer que su administración concluirá con 98 por ciento de cobertura de energía eléctrica, cuatro puntos más que al comienzo de su gobierno. Señaló que en breve se izará la bandera blanca en poblaciones de más de cien habitantes.

Mencionó que de acuerdo con el censo de 2010, había 112 millones de mexicanos y ahora esa cifra será de 115 millones, de los cuales 113 ya cuentan con el servicio de energía eléctrica. Una enorme proeza realizada por CFE, dijo el mandatario.