La Subsecretaría de Desarrollo Rural informó que productores de más de 400 municipios de Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán, que resultaron afectados por el paso del huracán Ernesto, recibirán apoyos del Componente de Atención a Desastres Naturales (Cadena).

Según la dependencia federal, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, en coordinación con los gobiernos de dichos estados contrataron cobertura de seguro agrícola por poco más de 3 mil millones de pesos para dos millones 19 mil 562 hectáreas.

El seguro agropecuario, que se encuentra activo para este año, cubre riesgos por sequía, inundación, huracán, vientos y fenómenos geológicos como terremoto, erupción volcánica, maremoto y movimiento de ladera.

En un comunicado señaló que dentro de Cadena se encuentran asegurados cultivos de ajonjolí, arroz, avena, cacahuate, cacao, café, chayote, frijol, maíz, mango, papa, plátano, sorgo y soya.

En tanto, debido a los remanentes de Helene, una zona de inestabilidad en el noroeste del territorio, el paso de una nueva onda tropical y un débil frente frío, se estima que continuarán las lluvias sobre la mayor parte de la República, informó el Servicio Meteorológico Nacional.

Añadió la subsecretaría que este domingo ingresará un frente frío en el norte de Chihuahua e interaccionará con la inestabilidad generada por los remanentes de Helene, lo que provocará nublados con lluvias de moderadas a fuertes en los estados fronterizos de la mesa del norte.

El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos informó que la tormenta Helene se degradó este sábado a depresión tropical tras tocar tierra en el noreste de México. El centro del meteoro se ubicaba a 25 kilómetros al sur de Tampico, Tamaulipas, con ráfagas de viento sostenidas de 55 kilómetros por hora, según el reporte.

La Secretaría de Protección Civil de Veracruz informó que la depresión tropical provocó fuertes lluvias en el norte de la entidad, por lo cual se realiza un monitoreo frecuente en los ríos Pánuco, Tuxpan, Tecolutla y Nautla.

Hasta ahora no se reportan afectaciones, y el trabajo ha consistido en supervisión de la instalación de albergues, las reservas estratégicas y coordinación de las acciones con autoridades federales y las municipales.

En Durango, después de dos años, el agua que ha caído por precipitaciones pluviales ya rebasó los promedios mensuales; sin embargo, unas 260 comunidades rurales continúan sin abasto de agua para consumo humano, por lo que a 56 mil duranguenses se les atiende con pipas.

La mayoría de comunidades rurales que aún padecen por falta de agua está en la región del semidesierto, donde han caído 50 por ciento menos lluvias, señala Fernando Hernández Contreras, meteorólogo de la Comisión Nacional del Agua.

Estos poblados, a los que aún se les abastece el líquido con pipas se ubican en los municipios de San Juan de Guadalupe, Tlahualilo, Mapimí, El Oro, Santa Clara, pero también en la zona serrana de San Dimas y Santiago Papasquiaro.

Con información de Saúl Maldonado, corresponsal