En una operación de precisión destinada a debilitar de manera contundente la estructura operativa y logística de los grupos delincuenciales con presencia en Coahuila, elementos de fuerzas especiales del Ejército detuvieron a Teófilo Rocha Villalobos, El Cochiloco, y a su hijo Teófilo Rocha Marín, encargado de la seguridad personal del primero, informó la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).

Agregó que El Cochiloco –presunto jefe de plaza de Los Zetas en Matamoros, Coahuila– está relacionado con el secuestro y la ejecución de por lo menos seis militares que se negaron a colaborar con él.

La aprehensión, en Zacatecas

La captura ocurrió el pasado 31 de agosto en Guadalupe, Zacatecas, en una acción durante la que fueron incautadas dos armas largas, cargadores, cartuchos, un vehículo, equipo de cómputo y equipo comunicación.

La dependencia no dio más detalles sobre la detención. En un comunicado de prensa, afirmó que además de ser jefe de plaza en el citado municipio coahuilense, Rocha Villalobos era el presunto encargado del trasiego y la distribución de droga en la región Lagunera.

La Sedena añadió que al poner a El Cochiloco a disposición del Ministerio Público, éste reconoció que como resultado de las operaciones antidrogas del Ejército en la Comarca Lagunera, su organización perdió el control de las actividades en la región.

Por lo anterior, a principios de marzo pasado, Heriberto Lazcano Lazcano, El Lazca, líder del cártel de Los Zetas, ordenó que retomaran el control del área, utilizando como principal factor la violencia y la intimidación de las autoridades y la población civil, mediante ejecuciones, decapitaciones y secuestros, para lo cual contó con el apoyo de Juan Vera Ovando, El Comillo.

Se presume, indicó la Sedena, que Rocha Villalobos sostuvo enfrentamientos armados en contra del cártel del Pacífico, “siendo patente su presencia en mensajes colocados en mantas y personas decapitadas que aparecieron entre julio y octubre de 2011, donde era señalado como probable responsable de las ejecuciones de integrantes de esa organización criminal”.

La institución agregó que El Cochiloco reconoció además que él y Renato Patiño Martínez, El Comandante Borrado, detenido por la Sedena el 20 de noviembre de 2011, así como un individuo apodado El Gato, “secuestraron y ejecutaron a por lo menos seis militares, por negarse a colaborar en acciones criminales”.