Anuncia que no reconocerá el resultado del congreso del SNTE
Lunes 10 de septiembre de 2012, p. 47
La iniciativa de reforma laboral enviada de manera reciente por el presidente Felipe Calderón al Congreso es parte de las monedas de cambio
y de las negociaciones políticas
con Enrique Peña Nieto, expresó la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), la cual anunció que no reconocerá los resultados del próximo congreso del sindicato magisterial encabezado por Elba Esther Gordillo para la renovación de la dirigencia.
La sección novena del Distrito Federal, en voz de su dirigente Francisco Bravo, anunció que discutirá la construcción de una nueva organización sindical en el contexto de su congreso seccional democrático, que se realizará el 29 de septiembre. Ello ante la negativa de la dirigencia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) de emitir la convocatoria para realizar una asamblea democrática y limpia, en la cual los maestros de la capital del país puedan elegir libremente a sus representantes.
En conferencia de prensa, Francisco Bravo y el dirigente de la sección 18 de Michoacán, Jorge Cázares, anunciaron el inicio de protestas contra dicha iniciativa del Ejecutivo, mismas que se realizarán en conjunto con otras agrupaciones sindicales.
Advirtieron que la propuesta se inserta en un contexto de injerencia de carácter laboral, educativo y social de la iniciativa privada, lo cual es muy preocupante
ante el inicio del sexenio de un presidente impuesto por las televisoras y la clase empresarial
.
En esa iniciativa, señalaron, todas las ventajas son en favor del patrón
. Así, existe una subcontratación mediante la cual los trabajadores se quedan sin las mínimas condiciones de seguridad y se eliminan los contratos para establecer convenios a prueba, carentes de obligaciones para el patrón.
En relación con el sexto congreso extraordinario convocado por Elba Esther Gordillo, del 18 al 20 de octubre en Puerto Nuevo, Baja California, para la renovación de la dirigencia, Bravo expresó que será un acto antidemocrático, elitista, en el que la lideresa vitalicia definirá cómo seguir sacando ventajas en el sexenio venidero, por lo que para nosotros no es válido y no lo reconocemos
.
No descartó la posibilidad de que la CNTE pueda sabotear
dicho congreso.