La ocupación hotelera llegará a 60 por ciento, señalan autoridades
Viernes 14 de septiembre de 2012, p. 46
Con banderas, trompetas y matracas de origen chino; así como con cenas que van desde 500 hasta mil 539 pesos con habitación de lujo incluida, los capitalinos se preparan para celebrar el Grito de la Independencia.
El Gobierno del Distrito Federal estimó que la ocupación hotelera en la ciudad oscilará entre 50 y 60 por ciento, ante la llegada de cientos de visitantes nacionales y extranjeros interesados en acudir al Zócalo y ver el desfile militar el domingo.
La ciudad, comentaron autoridades de Turismo, cuenta con una diversidad de atractivos turísticos, culturales y de diversión, que podrán aprovechar sus habitantes y turistas, al caer el festejo en fin de semana, lo cual se reflejará en una importante derrama económica
.
De continuar esta tendencia, cerraremos la administración revirtiendo la caída registrada en 2009, a consecuencia del brote de influenza, al llegar a 14 millones de visitantes durante el año y una derrama de cuatro mil millones de pesos, cifras 10 por ciento superior a las registradas en 2011
, se destacó.
El presidente de la Cámara de Comercio de la Ciudad de México (Canaco), Ricardo Navarro, lamentó que gran parte de los adornos para estas celebraciones sean made in China “y hayan entrado de manera ilegal, provocando una competencia desleal para una industria con mucha antigüedad en el país”.
De acuerdo con los resultados de una encuesta realizada por la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (Canacope), 34 por ciento de los capitalinos cuenta con una bandera, 16 por ciento acudirá a los vendedores de carritos típicos y 12 por ciento al comercio informal para adquirirla.
El gasto estimado para la celebración oscila entre 500 y más de tres mil pesos, de quedarse en casa, ir al Zócalo o acudir con la pareja o la familia a un restaurante, bar o cantina, los cuales ofrecen diversos paquetes, que se ajustan al presupuesto de los clientes.
La falta de dinero, los compromisos contraídos, el trabajo, la inseguridad o la necesidad de descansar, en ese orden, son algunas de las limitantes para que la gente no aproveche el puente patrio
, destacó el organismo empresarial.