El gobierno estatal, omiso ante ataques constantes, señalan integrantes de la organización
Aseguran que los agreden por luchar contra la sobrexplotación de acuíferos en el noroeste de la entidad y por rechazar operación de una minera canadiense
Fue un crimen de Estado: ONG
Martes 23 de octubre de 2012, p. 29
Chihuahua, Chih., 22 de octubre. Ismael Solorio Urrutia, miembro de la dirigencia de El Barzón en el estado, murió acribillado este lunes cuando viajaba en compañía de su esposa, Manuela Solís Contreras, por la carretera Cuauhtémoc-Alvaro Obregón, a unos 130 kilómetros de esta capital. En el ataque, perpetrado con armas largas, también se dio muerte a la cónyuge del líder.
Decenas de barzonistas tomaron la oficina del secretario general de Gobierno, Raymundo Romero Maldonado, a quien reclamaron la pasividad de la administración estatal para detener una serie de ataques contra los dirigentes de la organización.
Argumentaron que esa campaña de atentados responde a las acciones de El Barzón en defensa del ambiente, afectado por la sobrexplotación de mantos freáticos en el noroeste del estado, y contra la minera canadiense Mag Silver, que hace trabajos de exploración en el ejido Benito Juárez, municipio de Buenaventura, pese a la decisión de la mayoría de los ejidatarios en contra.
El 13 de octubre Ismael Solorio y un hijo suyo fueron agredidos por empleados de la minera y tres ejidatarios de Benito Juárez que estaban a favor de la empresa. El barzonista se reunió el lunes con Raymundo Romero, quien le ofreció protección, pero no cumplió.
Organizaciones sociales y de derechos humanos, así como familias de mujeres asesinadas y desaparecidas, calificaron los asesinatos de Ismael Solorio y de su esposa de crímenes de Estado. ¡Uno más, cabrones, porque ustedes no hacen nada! ¡Saben que los pueblos están llenos de sicarios al servicio de los poderosos y no hacen nada!
, gritaron a Raymundo Romero y al director de Gobernación estatal, Wilfrido Campbell.
Se informó que Solorio Urrutia viajaba a la capital de Chihuahua junto con su esposa para acudir a una cita médica, y lo usual habría sido que se desplazaran por la carretera Flores Magón y la autopista Juárez-Chihuahua. No obstante, su vehículo y los cuerpos fueron localizados en el kilómetro 130 de la carretera Cuauhtémoc-Álvaro Obregón, una zona alejada de su lugar de origen y de su destino, lo que hace suponer que fueron levantados y ejecutados.
Dirigentes de El Barzón, entre ellos Gabino Gómez, afirmaron que el dirigente y su esposa viajaban en una camioneta Ford Lobo King Ranch modelo 2003, color azul marino, con placas DZ 71876, en la cual fueron encontrados con varios impactos de proyectil de arma de fuego.
La camioneta estaba estacionada en una brecha del campo menonita 8. El barzonista recibió balazos en la cabeza, y su esposa, en el abdomen. Sin embargo, en la escena del crimen no fueron localizados casquillos. El comandante de la policía municipal de Cuauhtémoc, Gabriel Chacón, informó que aparentemente fueron victimados a quemarropa.
Los cuerpos fueron hallados muy cerca de las áreas habitacionales del campo menonita, pero los residentes dijeron no haber escuchado nada.
Al cierre de esta edición trascendió que cuatro presuntos implicados en el asesinato habían sido detenidos por elementos del Ejército Mexicano, que les decomisaron armas, y se realizaban pruebas de balística.