El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Gerardo Gutiérrez Candini, afirmó en un videomensaje que México sigue siendo uno de los países con más desigualdad social, al tener 52 millones de pobres. Nuestro sistema político lejos de solucionar estos retos, muchas veces es un obstáculo, sentenció durante la 25 entrega del Premio Nacional Tlacaélel.

El mensaje transmitido frente al secretario de Educación, José Ángel Córdova, y Julio Millán, presidente de Consultores Internacionales –a quien se le rindió un homenaje–, destacó que como nación se han dado pasos decisivos hacia la democracia y a una economía de mercado moderno.

“Hemos logrado una estabilidad macroeconómica ejemplar con fundamentos sólidos, pero en tres décadas no hemos conseguido crecer a más de 2.4 por ciento anual en promedio, ni crear empleos ni oportunidades suficientes en cantidad y calidad.

“Ante los retos que enfrentamos –agregó–, México pide grandes economistas, pues enfatizó que en el sector empresarial se busca impulsar una agenda común en colaboración con el presidente electo, Enrique Peña Nieto, y su equipo de transición, pero también con todas las fuerzas políticas, los legisladores y distintos sectores de la sociedad.

Por su parte, Yoloxóchitl Bustamante Díez, directora general del Instituto Politécnico Nacional (IPN), afirmó que en México se enfrenta a un reto mayúsculo, pues pese a la estabilidad macroeconómica y el control de la inflación, 12 millones de mexicanos viven en condiciones de pobreza extrema, mientras que 40 millones en pobreza moderada.

Con la asistencia de decenas de estudiantes galardonados a la mejor investigación en economía, apuntó que aún con un crecimiento de las reservas internacionales, control de las tasas de interés, y moderado endeudamiento, seguimos padeciendo el aumento de la pobreza, la falta de empleo suficiente y bien remunerado, y el bajo crecimiento económico.

Subrayó que sin duda las cifras más preocupantes son las que arrojan los índices de pobreza nacional. Agregó que de acuerdo con datos recientes del Consejo Nacional para la Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) del total de habitantes del país, 39 millones son vulnerables a causa de sus carencias sociales, es decir, que aún cuando tienen ingresos, éstos no alcanzan ni para obtener los alimentos y satisfactores más elementales. Por lo tanto, sólo 22 millones de personas cuentan con adecuado bienestar social.

Bustamante Díez enfatizó que este escenario también impone retos a las instituciones públicas de educación superior que forman economistas, pues desde la posición laboral en que se encuentren deberán aplicar todos sus conocimientos para buscar soluciones y alternativa a tan severo problema de nuestro desarrollo nacional.