Queremos demostrar que no somos egoístas, enfatizó uno de los participantes
Central Park, punto de salida de miles de corredores que se convocaron en las redes sociales
Recaudaron dinero para damnificados, repartieron provisiones y ayudaron en la reconstrucción
Lunes 5 de noviembre de 2012, p. 2
Nueva York, 4 de noviembre. Miles de corredores se dieron cita en Central Park para hacer su propio maratón, esta vez con un significado especial: amor, solidaridad con obras caritativas o ayudar a los damnificados del huracán Sandy.
Cinco, cuatro, tres, dos, uno... ¡Sí!
, gritaron a coro las personas que se lanzaron a correr bajo un cielo azul, aplaudidas por un público entusiasta.
Arribaron de todas las latitudes del mundo, algunos exhibiendo con orgullo y algo de decepción la camiseta oficial del maratón anulado el viernes por la alcaldía, pero la mayoría tenía por convicción llegar puntual a la cita en el corazón neoyorquino, que fue utilizado como punto de partida de decenas de carreras organizadas con la ayuda de las redes sociales.
Lugar simbólico donde cada año 47 mil personas del orbe entero cruzan la línea de llegada tras haber recorrido 42.195 kilómetros por sus calles, Nueva York recibió hoy a maratonistas que armaron su propio recorrido de manera informal en las aceras exteriores y los caminos internos del Central Park.
Es un lugar natural para darse cita
, dijo Lance Svendsen, coorganizador del Maratón 2012 A Pesar de Todo, mientras Jordan Metzel, otro estadunidense, prefirió estar en la tradicional salida del maratón, en Staten Island, el barrio más afectado por el huracán, en un proyecto para recaudar dinero en favor de los afectados.
El propósito es demostrar que los corredores no son egoístas, como se ha dicho
, explicó Metzel al canal local de televisión NY1, y destacó que los atletas recaudan continuamente dinero en favor de causas sociales en diversas pruebas.
Otros cientos de corredores con mochilas llenas de provisiones ayudaron a numerosas familias afectadas en la isla de Manhattan. Se comunicaban por radios y se organizaron de acuerdo con sus nacionalidades para tomar un punto de partida en los lugares más dañados, donde la energía eléctrica sigue interrumpida, para ayudar con la tarea de reconstrucción y de distribución de ropa.
“Es increíble. Calculo que han sido unas 600 personas hasta ahora. Fue una evocación del maratón original de la ciudad de Nueva York en 1970, cuando participaron 127 personas y se corría dentro del Central Park.
Con la cancelación, todos los corredores de este año tienen garantizada la entrada a la competencia de 2013, aunque no todos están seguros de poder acudir
, explicó el soldado Rubén Arredondo, de Los Ángeles, quien llegó al parque a las 6:45 horas para unirse a un grupo llamado Remplazo del Maratón, que se organizó por Internet horas antes.
La cifra subió y la oleada de corredores se dispuso a hacer por relevos la carrera de largo aliento tras la anulación de último momento del tradicional maratón de la gran manzana.
Si miles eligieron correr, algunos prefirieron reorganizar su domingo para participar en actividades de ayuda a las víctimas de Sandy; otros cedieron sus habitaciones de hotel a personas que perdieron su vivienda o seguían sin luz seis días después del huracán y también los hubo que ofrecieron dinero.
Por primera vez en 40 años, la tradicional competencia fue cancelada debido a los estragos causados por el huracán Sandy. Ni siquiera en 2001, tras el ataque a las Torres Gemelas, el maratón fue suspendido.